La Paz.- Los primeros colonos que se trasladaron del trópico de Cochabamba, en el centro de Bolivia, a la Amazonía de Pando (norte) denunciaron las malas condiciones de vida en los asentamientos y dijeron sentirse engañados por el plan del Gobierno, informaron hoy medios locales.
Según un reportaje de la televisión PAT, de las cerca de 350 personas que llegaron hace tres semanas al departamento amazónico de Pando, unas 40 ya han abandonado el asentamiento planificado de "Bernardino Racua" por la carencia de infraestructuras, el aislamiento y la dificultad para conseguir alimentos.
Estas migraciones, que están contempladas dentro de un plan del Gobierno de Evo Morales para "sentar soberanía" en la Amazonía, en las zonas fronterizas con Brasil, han sido tachadas de "electoralistas" por la oposición.
El asentamiento de "Bernardino Racua", en el municipio de Santa Rosa del Abuná, se encuentra a unos 190 kilómetros de la capital de Pando, Cobija, que según los reportes periodísticos suponen seis horas de viaje en vehículo en época seca y hasta tres días en temporada de lluvias.
Los colonos, que viven en tiendas de campaña militares, lamentan la escasez de alimentos, que según ellos se reducen únicamente a arroz y pasta, y la falta de transportes públicos y de comunicaciones para hablar con sus familias en El Chapare (Cochabamba, centro).
"Si me iba a enterar que iba a ser así, sin comunicarse, que no había coche para salir, no hubiera venido", aseguró una de las mujeres entrevistadas por PAT al explicar que pese a que siempre ha sido pobre, en su localidad de origen también tenía carne y verduras para comer.
Para el Gobierno, estos inconvenientes tienen que ver con un proceso de adaptación a las condiciones de la Amazonía y a los nuevos asentamientos en los que, según la viceministra de Desarrollo Rural, Teresa Morales, "todo está previsto": desde el aposentamiento hasta la etapa del desarrollo productivo.
"El tiempo nos dará la razón. Ustedes van a ver en 'Bernardino Racua' una comunidad próspera en poco tiempo. Esa comunidad va a estar haciendo producción de castaña para la exportación. De aquí a un par de años, será una comunidad próspera", afirmó hoy la viceministra en declaraciones a PAT.
Teresa Morales reconoció las malas condiciones de los caminos que rodean los nuevos asentamientos, así como que no existen transportes públicos y afirmó que algunos de los migrantes retornaron a sus comunidades de origen, pero "con la intención de recoger familia y algunas pertenencias para volver".
"Toda migración, incluso de ciudad a ciudad, tiene una tasa de decepción y la colonización seguramente más que ninguna otra", concluyó la funcionaria.
En el mismo sentido se expresó el diputado oficialista César Navarro al asegurar que "el Gobierno no ha ofrecido a nadie el paraíso terrenal", sino que se trata de "un proceso de construcción de sociedades que merecen esfuerzos institucionales, individuales y familiares" y la posibilidad de desarrollar actividades productivas.
En total, el Ejecutivo boliviano pretende mudar a dos mil familias de campesinos hacia la región norteña de Pando, fronteriza con Brasil.
Esta iniciativa ha recibido las críticas de la oposición, al considerar que el oficialismo pretende ganar votos en ese departamento de cara a las elecciones generales del 6 de diciembre.
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