Logroño.- El alcalde de Logroño, Tomás Santos, ha animado a los logroñeses y visitantes a disfrutar de los actos de San Bernabé a pesar de la crisis y ha confiado en que las calles se llenen con un "ambiente extraordinario".
En una entrevista concedida a Efe con motivo de las fiestas patronales de la ciudad, Santos ha adelantado que en sus "banderazos" tendrá un recuerdo especial para las personas ausentes y las que padecen los efectos de la crisis económica, además de recordar el trabajo por la recuperación del Casco Antiguo.
Con dos jordanas festivas en martes y jueves, muchos logroñeses aprovecharán el "macro-puente" para disfrutar de la playa u otros destinos, algo que el alcalde dice "entender y respetar, pero no compartir", por ello, ha invitado a los que se quedan y a otros que vengan de fuera a participar en las calles logroñesas, donde lo van a pasar "fenomenal".
El primer edil ha confiado en que el tiempo acompañe estos días, después del "diluvio" del año pasado, que fue su primer San Bernabé en el cargo, lo que no impidió que las calles estuvieran llenas de logroñeses, en especial durante la procesión y los "banderazos".
Estas fiestas rememoran la gesta de los logroñeses de 1521, que resistieron el asedio de las tropas francesas con el pan y el vino de las despensas y los peces pescados en el río Ebro.
Santos a incidido en el especial "cariño" que su equipo ha puesto en la organización de estas fiestas, para "mantener y potenciar la tradición", mediante una innovación lograda a través de la participación ciudadana.
Así, ha destacado la gran acogida que tuvo el año pasado la actividad para vestirse como logroñeses renacentistas, que esta edición se ha mejorado con un taller de costura, en vez de alquilar los trajes, además de la recreación del campamento francés y de las milicias logroñesas.
Los oriundos y visitantes podrán disfrutar del simulacro de batalla entre ambos ejércitos, un mercado con productos artesanales y agroalimentarios, una fiesta renacentista, comedias y otras actividades teatrales por las calles del Casco Antiguo.
De su recorrido en procesión por la calles del Casco Antiguo, ha resaltado el punto del segundo "banderazo", en la esquina de "Cuatro cantones" en la confluencia de Mercaderes y Marqués de San Nicolás, justo donde se ubicará el futuro Centro de la Cultura del Rioja.
Entre las novedades de esta edición, Santos ha resaltado la acuñación de los "revellines", la moneda de curso legal estas fiestas, que tiene paridad con el euro y con la que única divisa con la que se pueden adquirir artículos como la baraja de San Bernabé, el recortable y el cómic "El sitio de Logroño", que se ha reeditado.
Además, el poema sinfónico se traslada de Riojaforum a la iglesia de Santiago, con la participación del tenor Jorge Elías.
Ha incidido en que el presupuesto de Festejos es una partidas "más retocadas" este año, pero en sentido inverso, es una de las áreas en las que más se ha utilizado la "imaginación" para organizar el programa de actos e incorporar novedades.
Por ello, ha reconocido el intenso trabajo desarrollado por el "tándem" formado por el concejal de Festejos, Ángel Varea, y la edil de Participación Ciudadana, Inmaculada Sáenz.
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