Rebajas puntuales, un euribor históricamente bajo, y hasta un outlet inmobiliario. Todo parece conjugarse a favor de que las viviendas vuelvan a comprarse y venderse. Pero el espaldarazo definitivo podría haberlo dado el propio presidente del Gobierno en el Debate sobre el Estado de la Nación. Allí ha anunciado que, a partir de 2011, desaparecerá la desgravación fiscal por compra de vivienda a quienes perciban más de 24.000 euros brutos anuales. Es decir, que sólo hasta entonces estará abierta la posibilidad para todos de acogerse al régimen actual de desgravación —deducción máxima de 9.015 euros—, ya que, después, se limitará a las rentas más bajas. El miedo al 'lobo' ¿supondrá un nuevo miniboom inmobiliario con fecha de caducidad en año y medio?
Lo cierto es que los expertos no se ponen de acuerdo. Para unos, al no tratarse de una medida con carácter retroactivo, "a corto plazo podría ayudar a dinamizar el mercado, ralentizando la caída de los precios, acelerando el ritmo de compraventa de viviendas y reduciendo el stock", sentencia Fernando Encinar, jefe de estudios del portal inmobiliario idealista.com.
No está de acuerdo el presidente de la Asociación de Promotores Constructores de España (APCE), José Manuel Galindo, para quien "amenazar con que en 19 meses se restringirá la desgravación por vivienda no es suficiente para reactivar la demanda a corto plazo". En su opinión, "la gente se lanza a la adquisición de una vivienda cuando tiene confianza en que mantendrá su empleo o si se le facilita el acceso al crédito, condiciones que por ahora no se dan", argumenta.
Incide en esta cuestión —el empleo y el crédito— José Antonio Pérez, director del área de investigación del Instituto de Práctica Empresarial (IPE), para quien esta medida "sólo puede animar a la compra a aquel que tiene dinero, pero no a las rentas bajas". Y advierte del peligro que esto puede suponer, ya que "podrían aparecer especuladores, que aprovechen los bajos tipos de interés para volver a subir los precios, provocando una nueva miniburbuja".
Según los datos del Ine hechos públicos hoy, sigue siendo difícil vender. No obstante, Pérez ha percibido, visitando las casetas de venta de promociones repartidas por toda España, un pequeño aumento del ritmo de compraventas de viviendas. "Los ritmos están empezando a mejorar. Estamos en un punto de inflexión importante, y el mejor empujón para acelerar este proceso ha sido la bajada de los tipos de interés del BCE", comenta este experto.
También han ayudado los descuentos y rebajas aplicados por bancos, cajas de ahorro y promotores para la venta de paquetes de viviendas puntuales. En los últimos días, Caja Madrid y Caixa Catalunya han lanzado campañas con rebajas de hasta el 40%. Y Santander ha hecho lo propio hoy mismo. No podemos olvidar el rastrillo inmobiliario de Roan, con descuentos de hasta el 50%. Ni la última iniciativa para deshacerse del stock, que ha sido la creación de un outlet de pisos. Todas ellas intentan animar las ventas.
"Cuando quieres vender, el descuento directo es la solución más viable, y si va acompañado de un paquete de financiación, mucho mejor", asegura Jorge Rodríguez, consejero delegado de BtoB Marketing. En su opinión, para deshacerse del stock de viviendas existente "emplear conceptos como el outlet o las rebajas es una buena opción, pues ofrecen la sensación al comprador de que se trata de una oportunidad".
Y es que, según Encinar, éste "es un buen momento para comprar". "Puedes aprovechar los descuentos y beneficiarte de unos tipos de interés muy bajos", apunta. No obstante, tanto él como Rodríguez advierten que "no hay que dejarse llevar por un descuento llamativo, primero hay que ver la casa", recomiendan.
Sea como fuere, la gran incógnita es saber qué pasará con el mercado de la vivienda en venta a partir del 1 de enero de 2011, fecha en la que entrará en vigor la medida anunciada hoy por el presidente del Gobierno.
Según Encinar, lo previsible es que "el número de operaciones caiga por la desaparición de la desgravación". Y, a partir de ese momento, "es de esperar que la vivienda reduzca su precio, más teniendo en cuenta la mejora en la deducción del alquiler que se pondrá en marcha de forma paralela", explica este experto.
No lo tienen tan claro otros profesionales del sector. Desde el IPE, Pérez puntualiza que "todo dependerá de las condiciones financieras", es decir, que la banca tiene la sartén por el mango. Y duda de que esta medida pueda fomentar el alquiler en nuestro país. "Para crear un parque de alquiler residencial en España comparable al de otros países europeos, sería necesario que el Gobierno cediese suelo público para su creación, como se hace allí", apunta Pérez.
Otras dudas que surgen son:
Preguntas y más preguntas, para las que ni los expertos tienen respuestas... Zapatero, como Pedro el del cuento, ha dicho aquello de "¡Que viene el lobo!" ¿Llegará de verdad?
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