El mercado inmobiliario se ha convertido en un circo de tres pistas donde los promotores hacen malabares para vender su stock, andan por la cuerda floja intentando mantenerse a flote, y buscan llamar la atención del público con 'números' cada vez más inverosímiles. Al ir a comprar tu casa, hoy en día puedes solucionar tu problema de pareja sin coste alguno, o resolver los gastos del banquete nupcial, conseguir un viaje por la cara, e incluso encontrar trabajo. Las ofertas son variopintas, pero lo que el comprador sigue buscando son rebajas, rebajas, y más rebajas.
Actualmente, de cada cinco viviendas que se construyen en España sólo una acaba vendiéndose. Y es que, "para poder vender, hay que adaptarse a las necesidades de la demanda", afirma Diego Carreño, gerente de Geimsa, la inmobiliaria onubense de la que han partido muchas de estas iniciativas. Empezaron ofertando un piso de 105.000 euros con el que regalaban el banquete de bodas para unos cien invitados. Tan sólo gastaron "24 euros en la impresión de carteles anunciando la promoción", una mínima inversión que ha resultado "todo un éxito" para esta compañía, que ahora también ofrece correr con los gastos del divorcio a todo aquel que les compre un piso.
Y para los que no quieran cambiar su estado civil, pero sí estén interesados en comprar una casa, esta inmobiliaria regala un viaje; mientras que a los recién estrenados papás que necesiten un piso más grande, les da el cochecito. Pero ahí no acabará la cosa, Carreño promete "nuevas sorpresas en los próximos meses".
Sorprendente es, también, la oferta de la inmobiliaria valenciana Grupo Redis, que ha puesto en marcha una campaña "especial 25 aniversario", en la que se compromete a firmar un contrato de trabajo por 1 ó 2 años ("dependiendo de la valía del candidato") en una de sus empresas a quien le compre uno de sus unifamiliares antes del 1 de julio de este año, o descuento equivalente, cifrado en 36.000 euros.
No menos llamativo es el reclamo de una inmobiliaria sevillana para deshacerse de 49 adosados en la localidad de Burguillos. Atema se presta a cobrar únicamente 6 euros al mes durante año y medio a los clientes de esta promoción que se subroguen a la hipoteca que tienen estipulada. Una vez finalizado este periodo, los propietarios tendrán que hacer frente a unas cuotas hipotecarias en torno a 400 ó 500 euros, con un diferencial del 1% o el 2% sobre el euribor. Aquellos que opten por no subrogarse a la hipoteca, obtendrán un descuento de entre 115.000 y 150.000 euros, "dependiendo del coste de la casa".
Es lo que los expertos conocen como periodo de carencia, o 'de gracia' en el pago de las mensualidades hipotecarias. Algo que también ofrecen los promotores valencianos que trabajan con Bancaja, quienes, a través de la Hipoteca Descuento, se harán cargo de los intereses correspondientes a tres años de préstamo.
Lo propio hace la inmobiliaria Foproin Inversiones con 200 viviendas en Toledo, que pueden empezar a pagarse a finales de 2010. Eso sí, quien se decida a pagar antes de esa fecha "será bonificado con un descuento sobre el precio final", prometen.
Según Jorge Rodríguez, consejero delegado de BtoB Marketing, todas estas acciones "sólo buscan notoriedad", y advierte que "suelen aplicarse a unas pocas unidades y en zonas muy concretas, muy locales". Además, apunta este experto, "lo más práctico sigue siendo el descuento directo, porque el español quiere comprar a precio de oportunidad, está en nuestros genes".
Apoyan esta tesis los expertos de idealista.com, que han comprobado que "los compradores sólo reaccionan ante precios atractivos", y buscan "las viviendas más baratas en comparación con las de su alrededor".
Y si hablamos de precios, los que están teniendo un éxito que "ha superado todas las expectativas" son los creadores de lo que ya se conoce como "ruta del embargo", que ofrecen una visita en autobús por varias viviendas de obra nueva "procedentes de embargos o que no se venden", y que presentan "descuentos de hasta el 70%", explica África León, directora del Círculo Financiero Internacional, organizador del tour.
Desde que se puso en marcha esta iniciativa, hace cuatro semanas, han vendido "más del 75% de la cartera con la que comenzamos", dice León, quien comenta que la repercusión de esta idea ha traspasado nuestras fronteras. "Se han interesado por nuestras ofertas británicos, chinos, iraníes y de los Emiratos Árabes, que buscan 'chollos' en la Costa del Sol", asegura. Pero también ha despertado el interés de "jóvenes españoles que buscan casa por debajo de los 200.000 euros, y jubilados que quieren una casa en la playa a bajo precio", afirma León.
Actualmente, la 'ruta', que se iniciará en breve en Madrid, cuenta con 700 casas procedentes de la banca y de promotores, y con precios que van "desde los 140.000 al millón de euros —para una villa de lujo con más de mil metros cuadrados y valorada en 3 millones—", cuenta la responsable.
También se pueden encontrar ofertas en el outlet de pisos, y entre las viviendas que están sacando a la venta bancos y cajas, aunque son muchos los que dicen que 'no es oro todo lo que reluce' en estos casos. Y si buscas casa en Cataluña, quizá tu oportunidad esté en el próximo "salón low cost", el primero en España, que se celebrará del 12 al 14 de este mes en la Fira de Barcelona.
Para Jorge Rodríguez, ninguna de estas fórmulas es nueva. De hecho, hay quien se ha remontado nada más y nada menos que a los orígenes del comercio: el trueque, para buscar ideas para deshacerse del stock. Alfa Inmobiliaria ofrece este intercambio de casas a sus clientes. Y quizá muchos de los compradores y vendedores que se empiezan a poner en contacto a través de las redes sociales opten por una alternativa similar.
Aunque hay opciones más desesperadas, como la que ha llevado a David García a poner a la venta su casa en una "subasta inversa". A través de la página web www.tupisoporuneuro.com, los interesados pueden realizar sus pujas desde un límite mínimo de 1 euro, a un máximo de 150 euros. "El usuario que realice la puja más baja que no se repita será el ganador", explica García.
Su idea es conseguir los más de 320.000 euros que supone su hipoteca más los gastos de escrituración del piso. Pero en los tres meses que la iniciativa lleva en marcha "la cosa va floja", se lamenta García, quien confiesa que "va a aguantar un par de meses más, y, si no funciona, devolveré el dinero, con un coste para mí del 4,5% en gastos".
Más suerte parece haber tenido el austríaco Christian Gibler, que en marzo decidió vender papeletas de 99 euros para el sorteo de su chalé de 300 metros cuadrados en la Bahía de Palma. Lo ha vendido todo, según dice en su web, y eso que tenía que reunir a 16.000 interesados. El sorteo se realizará ante notario el próximo 28 de junio en Viena (Austria), porque allí este tipo de sorteos son legales.
Y es que hay que tener mucho cuidado con la letra pequeña y con los timos, que también los hay. El abogado y catedrático Jesús Alfaro, socio de CMS Albiñana y Suárez de Lezo, recomienda, en el caso de los sorteos, comprobar que éstos sean legales, que estén registrados —"si pides dinero a alguien por participar en una rifa o sorteo hay que comunicárselo al Estado para que sea legal", explica—. También aconseja mirar bien todas las cláusulas del contrato, si existen, "por si alguna de ellas fuera abusiva" o "indujera a comprar con engaños".
Si se da cualquiera de estas situaciones, se podría recurrir al artículo 8 de la Ley de Competencia Desleal, sobre obsequios, primas y supuestos análogos, donde se dice que "la oferta de cualquier clase de ventaja o prima para el caso de que se contrate la prestación principal se reputará desleal cuando induzca o pueda inducir al consumidor a error acerca del nivel de precios de otros productos o servicios del mismo establecimiento, o cuando le dificulte gravemente la apreciación del valor efectivo de la oferta o su comparación con ofertas alternativas. Estas últimas circunstancias se presumirán verificadas cuando el coste efectivo de la ventaja exceda del 15% del precio de la prestación principal".
Si no te interesa ninguna de estas ofertas, o no estás por la labor de comprar, al menos podrás pasar un buen rato buceando entre las curiosidades que algunos idean para vender. Aquí tienes algunas otras extravagancias comerciales:
Otra opción es atiborrarte a helados y esperar que te toque el que sorteará Nestlé entre todos aquellos que consuman sus productos, o tener la suerte de encontrar un alma caritativa como este mecánico de Lanzarote, que ofrece sus pisos vacíos gratis a las familias más necesitadas.
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