Santoña.- La flota del norte de España discrepa sobre abrir la pesquería de la anchoa en el caladero del Cantábrico en el segundo semestre del año, aunque está de acuerdo en que sólo cederá otro 10 por ciento de su cuota (hasta un 20 por ciento) a los franceses a cambio de pescar cebo vivo en la campaña del bonito.
Pero, como han recordado los presidentes de las Federaciones de Cofradías de Vizcaya y Cantabria, Iñaki Zabaleta y Manuel Vinatea, la flota francesa ha propuesto contar con 2.000 toneladas si se acaba con la veda de la anchoa, algo que los pescadores españoles no van a aceptar.
Los acuerdos entre España y Francia recogen que los pescadores españoles tendrán un 90 por ciento de la cuota, frente al 10 de los franceses, aunque estos porcentajes pueden variar si se producen acuerdos entre las flotas.
Zabaleta ha señalado, respecto a la apertura del Caladero, que se puede abrir con 7.000 toneladas de cuota máxima de capturas, mientras que Vinatea ha abogado por esperar a enero del próximo año para que se recupere.
Aunque los dos han reconocido que hay que esperar a lo que hoy se discuta en la reunión entre los sectores de Francia y España, que se celebra en Santoña.
Zabaleta ha insistido en que tras "casi cinco años" de veda de la anchoa en el Golfo de Vizcaya, la pesquería se puede abrir en el segundo semestre del año con una cuota "mínima" de 7.000 toneladas, aunque ha señalado que no se puede permitir que los franceses pesquen 2.000 toneladas del total.
El presidente de la Cofradía de Pescadores de Vizcaya ha afirmado que hasta ahora la flota española siempre ha salido perjudicada de los acuerdos frente a los franceses, que ha recordado que cuentan con unas 18 parejas de pesca y una media de seis tripulantes por barco, mientras que España tiene más de 200 embarcaciones con 14 tripulantes de media.
"Piden muchísimo más de lo que les podemos dar", ha asegurado Zabaleta sobre la propuesta de los pescadores franceses, que esta mañana ya han rechazado los españoles en una reunión previa al encuentro con las administraciones y los científicos.
A pesar de que insiste en que se debería abrir el caladero, Zabaleta ha señalado que habrá que conocer la opinión de los científicos y saber cómo se encuentra, aunque ha recordado que los expertos aún apuntan al riesgo que puede existir sobre la reserva de la anchoa en el Golfo de Vizcaya.
El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Cantabria, Manuel Vinatea, ha coincidido con Zabaleta en que el reparto que pretenden los franceses no se puede asumir, porque los pescadores galos cogerían de 5.000 a 6.000 kilos de anchoa por hombre frente a los 1.000 que, ha estimado, capturarían los españoles.
Pero respecto a la apertura del caladero, se ha mostrado partidario de esperar a enero del próximo año y ha recordado que si el sector extractivo no llega a un acuerdo tendrán que ser la Comisión Europea la que fije qué ocurre con la pesca de la anchoa.
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