Vitoria.- El Gobierno vasco y las Diputaciones vascas propondrán a sus funcionarios la congelación salarial para 2010 y mantendrán la desgravación de la vivienda en el IRPF, que el Estado eliminará en el año 2011.
Estas medidas han sido anunciadas hoy tras la reunión del Consejo Vasco de Finanzas (CVF) en Vitoria, en el que han participado el consejero vasco de Economía, Carlos Aguirre, y los diputados generales de Vizcaya, José Luis Bilbao; Guipúzcoa, Markel Olano, y Álava, Xabier Agirre.
En la reunión del CVF también se ha hecho el cálculo final de cuánto va a caer la recaudación de impuestos este año, que será el 19,1 por ciento, causada sobre todo por el descenso del IVA, el impuesto que grava el consumo. En dinero contante, la recaudación de este año será de 2.446 millones de euros menos y quedará en 10.388 millones.
Para el año 2010, la previsión es que la recaudación suba el 9,5 por ciento, hasta los 11.375 millones, gracias a los ingresos provenientes de la anunciada subida de impuestos, ya que la economía seguirá en recesión y se prevé que vaya a bajar el año que viene un 0,8 por ciento.
Precisamente esta mala perspectiva económica es la que va llevar a las instituciones vascas a proponer a sus funcionarios la congelación salarial para el 2010.
A pesar de que el Estado va a proponer el 0,3 por ciento de subida y de que hay compromisos pendientes de otros años, como los complementos de los fondos de pensiones, el consejero de Economía ha explicado que su intención es negociar con los sindicatos para que no se aplique la subida estatal y se aplacen los compromisos adquiridos.
El objetivo es que el incremento del capítulo 1 de los presupuestos, el de gasto de personal, sea cero en el 2010, como una contribución a paliar la grave situación de las finanzas públicas.
La posición a favor de la congelación es compartida por gobierno y diputaciones, e incluso José Luis Bilbao ha recordado que ya lo propuso en el pleno de política general de Vizcaya de hace unos días.
El motivo es la crisis, que va llevar a hacer unos presupuestos del 2010 restrictivos, en los que habrá que aumentar el endeudamiento para cubrir los gastos, aunque todavía no se ha fijado en cuánto se recurrirá a la deuda.
Respecto al aumento de impuestos, el principal cambio ya se conoce, y es que se va a eliminar la deducción fiscal de los 400 euros para los contribuyentes con rentas superiores a los 20.000 euros y mantenerla en su totalidad para los que tienen ingresos inferiores a 15.000 euros. Para los contribuyentes vascos con rentas entre los 15.000 y los 20.000 euros, la deducción se efectuará progresivamente.
Para el resto del Estado, la deducción fiscal de 400 euros se eliminará para todos los contribuyentes.
La mayor novedad de lo anunciado hoy es que las diputaciones han confirmado que no van a eliminar la deducción por vivienda que en el 2011 desaparecerá en el resto del Estado.
Sólo en Vizcaya esta deducción beneficia a más de 200.000 contribuyentes, a los que los tres diputados generales han dicho que "estén tranquilos" porque no se va a suprimir.
Respecto a la situación de los ayuntamientos, acuciados por la bajada de sus ingresos, el consejo vasco de finanzas ha decidido que no habrá un fondo de compensación de su caída de ingresos.
El motivo es que se mantiene la filosofía del sistema vasco, de riesgo compartido, por el que si bajan los impuestos repercute a todos. La intención, ha matizado el consejero de Economía, "no es ahogar a los ayuntamientos", por lo que será en cada territorio donde Diputación y municipios discutan cómo queda la financiación municipal.
También se han fijado hoy las aportaciones de las Diputaciones al Gobierno vasco, que apenas varían en sus porcentajes -Alava se mantiene igual, y aportará el 16,91 por ciento del total-, Vizcaya sube veinte centésimas, hasta el 50,14 por ciento, y Guipúzcoa, las baja, hasta el 32,95 por ciento del total.
El fondo de ajuste ente gobierno y diputaciones para garantizar una recaudación mínima se lo llevarán en esta ocasión Alava -40,2 millones- y Guipúzcoa -67,5 millones-.
Por otra parte, Xavier Aguirre ha dicho que las negociaciones para que el Gobierno central pague los 450 millones de IVA de los coches que debe a Alava van bien y podrían fructificar pronto, aunque es un dinero que no se ha incluido al calcular las cuentas del año que viene.
La cita ha terminado con una valoración política de José Luis Bilbao, quien ha destacado que las instituciones vascas "funcionan con total normalidad, al margen del color político. Hoy las diputaciones estamos aquí, donde tenemos que estar", ha concluido.
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