Valladolid.- La Junta de Castilla y León ha relativizado la importancia de los incendios forestales que se registran en la comunidad autónoma, mientras que la oposición parlamentaria ha calificado de "desaguisado" la política de prevención y extinción de fuegos.
El debate sobre la política forestal, iniciado esta tarde en el pleno de las Cortes de Castilla y León dentro de las preguntas orales, ha tenido su continuación durante una interpelación que la parlamentaria socialista Mónica Lafuente ha realizado a la vicepresidenta y consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz.
Ambas se han enzarzado en una disputa de cifras y comparaciones donde la vicepresidenta ha recordado que la media de incendios anotados en la comunidad autónoma entre 1999 y 2008 es de 2.044 fuegos, de los cuales más del 90 por ciento han sido provocados por acción humana, intencionados o no.
En el caso de los causados de forma voluntaria por pirómanos o intereses de diversa índole, Ruiz ha pedido al Grupo Socialista que requiera del Gobierno central, de su mismo signo político, más medios para investigar, detener y condenar a los culpables: "eso deberían denunciarlo ustedes si fueran coherentes".
Ese tipo de delincuencia es en la actualidad "una actividad impune o con muy poca penalización. Ahí es donde habría que actuar", ha añadido.
Ruiz ha advertido sobre el hecho de que las pérdidas relativas por fuegos en territorio castellanoleonés durante la última década "ha sido un cincuenta por ciento menor que la media nacional", y que no todos los siniestros se producen en verano.
La semana más perjudicial, según sus datos, ha sido la comprendida entre el 16 y 22 de marzo pasado, con un total de 249 incidentes, todos ellos intencionados.
El operativo de prevención y extinción, ha agregado, "permanece operativo los 365 días del año" y durante la última temporada, ha puesto como ejemplo, se han limpiado 43.500 hectáreas, de las cuales 30.000 han correspondido a labores silvícolas, mientras que medio millar han sido quemas controladas, 6.000 desbroces y otras tantas han pertenecido a cortafuegos.
"Pues si somos una de las comunidades autónomas que más invertimos, ¿por qué se registran tantos fuegos?", ha inquirido por su parte la parlamentaria socialista Mónica Lafuente, quien se ha mostrado contraria a esas apreciaciones.
"No hay una normativa de prevención ni siquiera en la Ley de Montes. Nuestros montes son huertos de madera con plantaciones de especies no autóctonas que sólo buscan la rentabilidad y las pistas se encuentran en un estado lamentable porque no cabe una motobomba: un desaguisado", ha lamentado Lafuente tras reconocer que el mundo forestal "es caro".
Por esta razón, antes que gastar en dinero en la extinción, ha recomendado una mayor incidencia de la prevención porque "los fuegos se apagan en invierno", y recomendado una mayor profesionalización del sector como "garantía de seguridad".
Ha pedido, por último, un mayor número de medios y esfuerzos, en los que otras comunidades autónomas "nos superan ampliamente".
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