Secciones bajar

La nueva cúpula talibán paquistaní y la lucha en la frontera afgana

EFE
Actualizado 27-08-2009 14:24 CET

Islamabad.-  Tras confirmar la muerte de su líder y nombrar sucesor, los talibanes paquistaníes parecen haber cerrado una disputada transición de poder, pero se desconoce si la nueva cúpula sale fortalecida de este proceso y si seguirá centrando su lucha en Pakistán o mirará más hacia Afganistán.

Algunas versiones mantienen que ha sido la intervención de los talibanes afganos la que ha puesto fin a semanas de "dura lucha interna" entre los diferentes grupos paquistaníes, que, de acuerdo con una fuente de los servicios secretos consultada por Efe, "los debilitó mucho".

Tras continuos anuncios y desmentidos, la cúpula de Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP) admitió este martes la muerte de su líder, Baitulá Mehsud, y nombró al frente del movimiento, que aglutina a diversas facciones talibanes paquistaníes desde finales de 2007, a un estrecho colaborador suyo, Hakimulá Mehsud.

De acuerdo con los Gobiernos de Islamabad y Washington, Baitulá había fallecido ya el día 5 en un ataque con misiles de un avión no tripulado de EEUU en la región tribal de Waziristán del Sur -hoy mismo se ha registrado otro en la misma zona-, pero los talibanes habían negado este extremo y mantienen que su líder murió el pasado domingo, después de semanas en coma.

"A los talibanes les llevó mucho tiempo escoger a un nuevo líder, pues había serias diferencias (...) y sólo la interferencia de los talibanes afganos condujo a la resolución del problema", aseguró una fuente oficial citada hoy por el rotativo paquistaní "The Nation".

Algunos analistas expusieron a Efe que el TTP, que en los últimos dos años puso en jaque al Estado paquistaní con sus ataques, se encuentra en uno de sus momentos de mayor debilidad, debido en parte al aumento de cooperación entre Pakistán y EEUU, algo demostrado con en el cerco que impusieron a Mehsud hasta matarlo.

Según las fuentes, otros síntomas de debilitamiento del TTP han sido la poca llegada de refuerzos desde la zona tribal fronteriza con Afganistán al vecino valle de Swat cuando el Ejército lanzó a finales de abril su operación contra la insurgencia, el descenso gradual de los atentados en los últimos meses y la sucesión de arrestos y deserciones.

El nombramiento de Hakimulá Mehsud, de 28 ó 29 años, "un tipo violento, listo y temperamental", con predilección por los atentados suicidas y experiencia como comandante en varias áreas tribales, según una fuente de inteligencia occidental, podría virar la tendencia y revitalizar una red que suma hasta 20.000 militantes.

De acuerdo con un redactor del diario "Dawn" conocedor de Hakimulá, el nuevo "amir" del TTP es una persona con poca educación religiosa, ambiciosa, mediática, buen disparador, aficionado a la tecnología, que no se lo piensa dos veces antes de matar y tiene intereses expansionistas más allá del cinturón tribal paquistaní.

Al igual que Baitulá, a cuya temida tribu "Mehsud" pertenece, Hakimulá es un confeso admirador del mulá Omar afgano, aunque los analistas consideran que inicialmente deberá barrer en su propia casa y zanjar cualquier disensión dentro del TTP antes de plantearse extender su lucha al país vecino.

De momento, a su principal contrincante, el clérigo Waliur Rehman, se le ha asignado el control de Waziristán del Sur, feudo máximo de los talibanes en Pakistán, en el que el Ejército estudia lanzar una gran operación contra los insurgentes tras semanas de bombardeos aéreos preliminares.

Una intención anunciada ya en junio que EEUU teme ahora que se esfume una vez muerto Mehsud, cuya red terrorista presuntamente vinculada a Al Qaeda ha sido la pesadilla del Gobierno paquistaní.

"Estamos observando las disputas internas para hacernos una idea clara de quién es el nuevo enemigo al que nos enfrentamos y cuáles son sus intenciones. Estamos estudiando las opciones y lanzar una gran ofensiva en Waziristán sigue estando ahí, es posible", dijo a Efe el portavoz militar, Athar Abbas.

No obstante, la fuente del ISI admitió que una perpetuación de los problemas internos en la cúpula talibán podría "ahorrar" a las fuerzas de seguridad llevar a cabo su ofensiva, pues los insurgentes olvidarían sus diferencias en caso de agresión.

En todo caso, Abbas subrayó que el Ejército continuará dando "prioridad a combatir a los integristas que actúen en suelo paquistaní" -los llamados "talibanes malos"- respecto a aquellos que crucen la frontera para lanzar sus ataques en Afganistán.

Igor G. Barbero

Di lo que quieras

Aceptar

Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »

En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.

Di lo que quieras

Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.

Volver a actualidad Volver a portada
subir Subir al principio de la página