Asunción.- El comandante de la Policía Nacional de Paraguay, Viviano Machado, renunció hoy en medio de un escándalo que estalló tras un extraño incendio que segó la vida de tres familiares de un mando policial.
Machado aclaró que como miembro de organismos de seguridad no puede renunciar directamente sino poner el cargo a disposición del jefe de Estado, Fernando Lugo, para que éste decida su suerte y se lamentó del "triste episodio en que un componente de la Policía pierde a tres integrantes de su familia".
El jefe policial se refirió así a la muerte de dos hijas adolescentes y de la esposa del comisario Edgar Salcedo, la noche del pasado lunes, en un incendio de la vivienda familiar que, en principio, fue atribuido a un presunto atentado por una reciente actuación del jefe policial.
Una semana antes de la tragedia, Salcedo acompañó una operación antidrogas en la que su hermano, el también comisario Ramón Salcedo, decomisó 10 kilos de cocaína, en la región del Chaco, de uno de los cinco camiones que hacían parte de una flota que provenía de Bolivia con un cargamento de jabón.
La tragedia tuvo un giro insospechado luego de que la abogada Teresa Escobar, esposa de Ramón Salcedo, revelara que dos días antes de la tragedia formalizó una amenaza telefónica que provino presuntamente de otro oficial, el comisario Vidal Machado, hermano del comandante de Policía.
Viviano Machado admitió que su hermano, sin funciones específicas tras ser readmitido en las filas tras denuncias de corrupción, fue el autor de la llamada que él ordenó realizar a un subalterno suyo para que Ramón Salcedo comparezca ante la Comandancia.
Machado reafirmó que los hermanos Salcedo están en la mira de una investigación policial interna ante denuncias de que se habrían decomisado mayor cantidad de cocaína que la declarada por ellos.
"Posterior a ese procedimiento (de incautación) hubo comentarios negativos. El Comandante convocó al que llevó adelante ese operativo para pedir explicaciones", señaló Machado, quien argumentó que su renuncia fue motivada por unas expresiones de los Salcedo.
Durante el sepelio de sus familiares, Edgar Salcedo trató de "cobarde" al máximo jefe policial, por lo que, Machado sostuvo que no le quedada otro camino que "ordenar el arresto de su subalterno o poner el cargo por la circunstancia que está viviendo el compañero".
Machado reafirmó que la hipótesis del accidente como causa del incendio a partir de evidencias preliminares recogidas en el lugar del siniestro por expertos, que no detectaron la presencia de restos de explosivos u otro tipo artefacto.
Por su parte, el ministro de Interior, Rafael Filizzola, dijo que el jefe de Estado "tiene una información detallada acerca de todo lo que ha ocurrido", así como "todos los elementos para tomar una decisión" sobre el asunto.
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