Buenos Aires.- El ministro argentino de Educación, Juan Carlos Tedesco, dejará su cargo para presidir una unidad especial de planeamiento y de evaluación de la educación, informaron hoy fuentes oficiales.
El anunció lo hizo el jefe de Gabinete de Argentina, Aníbal Fernández, luego de rumores en la prensa local sobre una inminente renuncia de Tedesco a su cargo.
Según explicó Aníbal Fernández en rueda de prensa, la presidenta argentina, Cristina Fernández, resolvió la creación de esta unidad especial, en el marco de una estrategia para el desarrollo de la educación, y eligió a Tedesco para que presida el grupo.
Tedesco, quien será reemplazado al frente de la cartera educativa por el viceministro Alberto Sileoni, dijo sentirse "muy honrado" por la nueva función que le asignó la mandataria argentina.
El jefe de Gabinete dijo que Tedesco mantendrá el rango de secretario de Estado y dependerá directamente de Fernández.
La nueva unidad estará destinada al análisis del estado actual de todos los niveles de la educación y a la planificación de los contenidos educativos y de la financiación de la educación desde 2010 hasta 2021.
"La presidenta decidió crear una unidad separada del Ministerio de Educación para ser ella quien siga la tarea de cerca y sacarle de encima la administración burocrática que tiene todos los días un ministerio como éste", señaló Aníbal Fernández.
Aunque Tedesco continuará colaborando estrechamente con Cristina Fernández, su salida del Ministerio de Educación supone un nuevo cambio en el gabinete de gobierno que se suma a los concretados en las últimas semanas, con la sustitución de dos funcionarios clave, el jefe de Gabinete y el ministro de Economía.
Las modificaciones en el Gobierno llegaron después de la dura derrota del oficialismo en las elecciones legislativas del pasado 28 de junio, en las que Néstor Kirchner, esposo y antecesor de Fernández, perdió a manos del opositor Francisco de Narváez, de la conservadora coalición Unión-Pro.
La mandataria aceptó el pasado 7 de julio las dimisiones del ministro de Economía, Carlos Fernández; del jefe de Gabinete, Sergio Massa; y también del secretario de Cultura, José Nun, lo que derivó en cambios en otras áreas centrales de gestión, como la cartera de Justicia.
El Ministerio de Economía quedó a cargo de Amado Boudou, mientras que Aníbal Fernández se convirtió en jefe de Gabinete y dejó así de ser el ministro de Seguridad, Justicia y Derechos Humanos, posición que ocupa ahora Julio Alak.
En tanto, la Secretaría de Cultura pasó a ser gestionada por el director de cine y dirigente político Jorge Coscia.
Tras los comicios legislativos de junio, la oposición reclamaba la salida de funcionarios cuestionados por su desempeño, como el ministro de Planificación, Julio de Vido, y el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, pero estos dos cambios no han sido implementados.
Los enroques comenzaron un día después de los comicios legislativos con la renuncia de quien era la ministra de Salud, Graciela Ocaña, en medio de la expansión de la gripe A en el país, y siguió dos días después con la renuncia del polémico secretario de Transportes, Ricardo Jaime, sobre el que pesan varias denuncias judiciales.
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