Los fuegos artificiales de la propuesta Zapatero de dotar a todos los niños de 5º de primaria con ordenadores portátiles empezaron a apagarse desde el mismo día en que la presentó, en el debate sobre el Estado de la Nación. Esa misma tarde desgranábamos las dudas que el plan Escuela 2.0 presentado por el Gobierno nos dejaba sin resolver: ¿cuánto será el coste de la medida? ¿Es verdaderamente necesaria? ¿Qué sistema operativo llevarán incorporados los equipos? ¿Están preparados los profesores para afrontar este reto?
Ya han pasado diez días desde entonces y pocas de estas cuestiones han obtenido respuesta. Especialmente desde que, el pasado martes, el Congreso aprobó todas las propuestas de Zapatero... en versión descafeinada. De hecho, de los boyantes 420.000 ordenadores, las conexiones inalámbricas a internet y las pizarras digitales se pasó a este texto final que redactó el grupo parlamentario socialista, un documento cargado de buenas intenciones inmersas en un tono de indefinición.
Apostar por la modernización e innovación de nuestro sistema educativo generalizando la incorporación de las tecnologías de la información y la comunicación a los sistemas de enseñanza y aprendizaje; extendiendo la dotación de ordenadores al alumnado de los últimos cursos de Primaria y Secundaria; favoreciendo el trabajo en red entre los centros educativos y la comunidad educativa, así como la formación del profesorado. Se acordará con las comunidades autónomas la utilización, en su caso, de sistemas operativos desarrollados en diferentes comunidades autónomas en código abierto.
La única respuesta que ofrece la propuesta del PSOE es en lo relativo a si los equipos llevarán Linux o Windows, decisión que recaerá sobre los propios Gobiernos autonómicos, ya que algunos cuentan con su propia distribución de Linux. De lo demás, nada: no aparece la palabra portátil por ninguna parte (sólo "ordenadores") ni se menciona a qué cursos se destinarán (se habla de "los alumnos de los últimos cursos de Primaria y Secundaria"). Tampoco se especifica ningún plazo de entrega de los ordenadores. Sin embargo, según han informado fuentes del Ministerio, el plan sigue adelante y septiembre se mantiene como fecha para empezar a repartir los equipos en los colegios, a pesar de que algunos consideran esta previsión como excesivamente optimista.
Como Educación es una competencia transferida a las autonomías, los siguientes pasos que tienen que darse para concretar el plan deberán involucrar a los ejecutivos regionales. Y precisamente esta semana Ángel Gabilondo ha tenido la oportunidad de empezar a dialogar con los consejeros de Educación, con los que se ha reunido en la Conferencia sectorial que tuvo lugar el pasado martes. En este encuentro, el ministro presentó las líneas generales del pacto nacional de educación que pretende alcanzar con fuerzas políticas y agentes sociales, uno de los objetivos que se ha marcado como prioritario tras años y años de desencuentro partidista en materia educativa. Y precisamente uno de los puntos que ocuparon la agenda del encuentro fue la modernización del sistema escolar y la propuesta concreta de los ordenadores.
Tras este paso, el Ministerio convocará en los próximos días a una reunión a los responsables autonómicos de nuevas tecnologías en educación y les pedirá que presenten un plan específico con las necesidades de cada Comunidad. En este punto es necesario recordar que algunas de ellas ya sacan varias cabezas de distancia a las demás en lo que se refiere a la implantación de nuevas tecnologías en el aula, como es el caso de Castilla-La Mancha. Después de eso, se creará una comisión específica en el marco de la Comisión sectorial para tomar las decisiones definitivas al respecto. Pero, ¿podrán resolverse todos estos trámites antes de que los alumnos regresen a las aulas en septiembre para estrenar sus ordenadores?
Aunque la modernización tecnológica del sistema educativo se ha marcado como uno de los ejes prioritarios de la política educativa del Gobierno y del plan de actuación de Gabilondo, la idea de que la medida de Zapatero fue una improvisación en toda regla no termina de desaparecer, a pesar de los esfuerzos del nuevo ministro por explicar que se trata de una estrategia global. Mientras las comunidades gobernadas por el PSOE han recibido la medida con benevolencia, Madrid o Galicia, comunidades gobernadas por el PP, se han mostrado muy críticas. Por ejemplo, el consejero gallego, Jesús Vázquez, ha puesto en duda su "utilidad pedagógica" y ha tildado la medida de "simple eslogan". Lucía Figar, su homóloga en Madrid, ha recalcado que "un regalo masivo de ordenadores no soluciona los problemas fundamentales de la enseñanza".
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.