Albacete.- Los familiares del cabo albaceteño Israel Ferrer, fallecido en el accidente del Yak-42 ocurrido en mayo de 2003, se sienten "aliviados" con la sentencia que condena a tres de los acusados, aunque reconocen que "nunca podremos estar satisfechos porque ésta ha sido y es una situación muy difícil".
Así lo ha expresado, en declaraciones a Efe, Antonio Redondo, cuñado de Israel Ferrer y que ha actuado como portavoz de la familia desde que sucediera el trágico accidente.
Redondo ha incidido en que la familia se siente "aliviada" porque "alguien va a pagar por el profundo daño que nos han hecho" aunque ha lamentado que "como llevamos denunciando todos estos años, ahí no están todos los que fueron".
Ha rechazado entrar en más valoraciones sobre la sentencia "porque todavía no la conocemos en profundidad", pero ha incidido en que el que fuera ministro de Defensa cuando ocurrieron los hechos, Federico Trillo, "debe tomar nota de esta sentencia y, al menos, irse de la política que es lo que tendría que haber hecho hace unos años".
El fallo de la Audiencia Nacional, que se ha hecho público esta mañana, ha condenado a tres años de prisión al general Vicente Navarro y a 18 meses de cárcel al comandante José Ramírez y al capitán Miguel Sáez por las identificaciones erróneas de 30 de los 62 cadáveres de los militares españoles fallecidos en el accidente del Yak-42.
En ese accidente perdieron la vida dos militares albaceteños, el cabo Israel Ferrer y el sargento José Antonio Tornero.
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