Asunción.- El presidente paraguayo, Fernando Lugo, dijo hoy que su país fue tratado "en inferioridad de condiciones" en el acuerdo de construcción de la hidroeléctrica de Itaipú, emplazada sobre el río Paraná y compartida con Brasil.
El Tratado de Itaipú, firmado en 1973, regula todo lo relativo a la represa y dice que Brasil y Paraguay tienen derecho cada uno al 50 por ciento de la electricidad generada y que la energía no usada debe ser vendida al otro socio, a un precio fijo.
"Creemos que en estos 35 años de la firma de ese tratado, nuestro país, el Paraguay, ha sido tratado en inferioridad de condiciones en la administración y en los beneficios" de la central, afirmó Lugo en la reunión semestral de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que se celebra en este país.
Lugo, quien asumió al poder el 15 de agosto pasado, expuso la postura de su Gobierno con respecto a la libertad de prensa en su país y tras su alocución respondió a preguntas del auditorio, una de las cuales sobre los temas que abordarán con su homólogo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el 8 de abril próximo en Brasilia.
"Sin ninguna duda el tema de Itaipú está a flor de piel", aseveró el gobernante, quien reiteró que lo que su país "recibe hoy como compensación no satisface las expectativas de Paraguay", que reclama el aumento del precio de la energía que cede a Brasil y la opción de negociar el excedente con terceros países.
Esas reivindicaciones están contenidas en una petición de seis puntos elevada a Brasil, que si bien ha expresado su disposición de acceder a algunos de los reclamos, rechaza la revisión del tratado bajo el argumento de que no puede ser revisado hasta que expire, en el 2023.
Paraguay satisface el 90 por ciento de su demanda con solo el 5 por ciento de la electricidad de Itaipú y el resto acaba en Brasil, que paga unos 300 millones de dólares anuales, de los cuales poco más de 100 millones de dólares corresponden a la cesión de energía.
"Queremos por lo menos de 1.200 a 1.800 millones anuales", dijo Lugo esta semana e insistió en que Paraguay sólo pide "precios de mercado" y no los establecidos en el tratado.
Por su parte, el ministro brasileño de Minas y Energía, Edson Lobão, declaró que Paraguay "sólo aportó una parte del agua" del río Paraná y agregó: Asunción "no se convence" de que debe "respetar" el Tratado de Itaipú, que calificó de "monumento jurídico aprobado por los Congresos de Brasil y de Paraguay".
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