Polarización total en El Salvador

SAN SALVADOR (EL SALVADOR).-  Los salvadoreños votarán el próximo domingo a su próximo presidente después de la campaña electoral más larga, violenta y sucia de las últimas décadas. Las encuestas dan un empate técnico y los indecisos se han convertido en una fuerza decisiva. El fantasma del fraude también planea en unas elecciones muy polarizadas.

Los anuncios de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena) acusan sin matices a Maurico Funes, candidato de la antigua guerrilla izquierdista del Frente Farabundo Marti para la Liberación Nacional (FMLN), de ser un peón de los comunistas o el delfín del farabundismo, le apodan 'El Fúnebre' y aseguran que "quiere reformar la Constitución para convertirse en un dictador como Chávez, aliado del eje del Mal". Los anuncios acaban con un contundente "Salvadoreño, no te dejes engañar".

El periodista Mauricio Funes ha realizado una campaña política alejado de los símbolos del partido y de su compañero de fórmula, Salvador Sánchez Cerén, uno de los cinco comandantes guerrilleros que negoció la paz en los años 90, mientras el FMLN ha limpiado su web de fotografías en las que aparecían sus líderes junto a Fidel Castro y Hugo Chávez.

Un movimiento sin precedentes llamado 'Amigos de Mauricio', entre los que hay antiguos simpatizantes de Arena y militares que lucharon contra las guerrillas, se ha unido a la candidatura izquierdista con el objetivo de derrotar a la derecha que lleva 20 años en el poder y arrastrar el voto de los disconformes que no se atreven a votar por el cambio.

Pero Arena ha contraatacado con montajes fotográficos en los que se ve a Funes acompañado del cubano Fidel Castro, el venezolano Hugo Chávez y el nicaragüense Daniel Ortega al lado de eslogan 'Los verdaderos amigos de Mauricio'.

El Diario de Hoy, de extrema derecha, aseguraba hace poco que "una cosa son las promesas del charlatán [en referencia a Funes] que sirve de piel de oveja a los lobos y otra lo que va a ocurrir: la inmediata desconfianza, la paralización de las inversiones, el miedo de la gente".

El candidato de Arena, el ingeniero Rodrigo Ávila, ex director general de la Policía Nacional Civil, acusó directamente a Funes de recibir dinero de Chavez mientras visitaba un mercado de la capital, donde probó una sopa hirviendo que le quema la lengua. "Quien paga al mariachi ordena la canción", le dijo a este este periodista.

¿Aceptarán las dos formaciones los resultados electorales si son negativos? El FMLN ha perdido varias contiendas electorales y ha asumido la derrota sin incidentes. El candidato Ávila afirma que Arena es un partido democrático que condena la violencia y defiende la legalidad. Pero a su alrededor nadie es capaz de asumir una posible derrota y se refugian en la 'sabiduría del pueblo' para rechazarla frontalmente.

La izquierda ganó las elecciones municipales y parlamentarias del 18 de enero, aunque no por un resultado tan abultado como esperaba. El FMLN consiguió el 42,5% de los votos frente al 38,4% de Arena, 35 diputados contra 32. El Partido de Conciliación Nacional (PCN), considerado una fuerza derechista vinculada a los militares, tiene la llave de la gobernabilidad con 11 escaños en una Asamblea Legislativa con 84 escaños. El golpe más duro para la ex guerrilla fue la pérdida de la alcaldía capitalina.

Aunque las elecciones fueron bendecidas por los observadores de la Organización de Estados Americanos y de otras instituciones internacionales, un informe presentado recientemente por la Universidad Centroamérica José Simeón Cañas y el Instituto Electoral de Opinión Pública, basado en sus propias observaciones en 1.500 mesas electorales, da cuenta de múltiples violaciones del proceso electoral.

Según esta investigación, en el 44,6% de los colegios los electores votaron siendo observados por otras personas, en el 22% algunos votantes no pudieron ejercer su derecho electoral porque sus nombres no aparecían en el padrón y en el 3,7% porque otras personas habían suplantado sus identidades. En tres de cada diez colegios hubo personas haciendo propaganda para influir en los votantes. En algunos colegios la votación se detuvo a pesar de que había personas esperando su turno y en otras algunos electores salieron del centro de votación sin entintarse los dedos.

Un 68,4% de salvadoreños ya tiene decidido su voto, según el último sondeo del Instituto Universitario de Opinión Pública de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, mientras otro 28,2% todavía se lo está pensando. Un 3,4% no ha respondido o no sabía por cual de los dos candidatos votaría.