Madrid.- El temporal de viento, fuerte lluvias, nieve y desbordamientos de ríos de las últimas semanas ha afectado fundamentalmente a las cosechas de cítricos y hortalizas en las Comunidades de Murcia y Valencia, a los cultivos herbáceos e industriales de Navarra, Aragón y Cataluña, así como a los forestales de Galicia, Cantabria y País Vasco.
Estas son las principales conclusiones del informe de daños, a 6 de febrero, elaborado por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) como consecuencia del fuerte temporal que durante los últimos días ha azotado a gran parte del país.
Indica que, en la comarca del Campo de Cartagena, se han dañado un buen número de estructuras de invernaderos dedicadas esencialmente al pimiento y se ha perdido el plástico en muchos de ellos, y que miles de kilos de naranja Navelate, que ahora mismo estaba en plena recolección, "han acabado en el suelo".
Otro sector que ha sufrido fuertes daños, según COAG, ha sido el de uva de mesa, ya que la estructura de malla ha quedado muy dañada en todo el Valle del Guadalentín, al igual que ha ocurrido con los invernaderos de flores en Canara-Cehegín.
En el caso de las hortalizas se han producido pérdidas de la protección denominada "manta térmica" que se utiliza para el cultivo de la lechuga, especialmente en el Valle del Guadalentín.
En la Comunidad Valenciana se han caído al suelo las producciones citrícolas de las variedades tardías y de media estación que aún no se habían recogido.
La falta de precio para los cítricos ha provocado que muchos agricultores hayan optado por retrasar la recolección y ahora esa producción se ha visto afectada por las adversas condiciones climáticas.
En Andalucía, el temporal más que provocar daños en cultivos o estructuras está retrasando las labores (cosecha, aplicación de tratamientos y poda) y puede causar, a medio plazo, que baje la productividad de algunos cultivos (como cereal, remolacha o patata), algo que también dependerá de cómo evolucione la situación, según la organización agraria.
El fuerte viento sufrido en Aragón ha provocado pérdidas en el campo, especialmente en el cultivo del maíz y en instalaciones agrícolas y ganaderas.
Según el informe, en esta campaña, a estas alturas de ciclo vegetativo, todavía queda mucho cereal de primavera por cosechar debido a la humedad y a su bajo precio, causas que han retraído a los agricultores a realizar su recolección.
Destaca que la comarca de los Monegros de Huesca es una de las más afectadas, con unas pérdidas por hectárea de unos 2.000 kilos a 0,12 euros por kilogramo, es decir de 240 euros por hectárea.
En Castilla y León, el informe detalla que en la comarca Benavente-Valles el maíz se ha visto afectado, entre un 20 y 30% del producto (cañas), y advierte de que "si el temporal no sigue se podría recoger en la siega el 90 por ciento de la cosecha".
En Cataluña, se han visto afectados un 75% en las comarcas ilerdenses de L'Urgell, Pla d'Urgell, La Noguera, y Segrià, y los cultivos de invernaderos en el Baix Llobregat y Tarragona, con daños en otras instalaciones, como cubiertas de granjas y de almacenes agrícolas.
Por su parte, en Galicia los daños alcanzan ya a unas 40.000 hectáreas de cultivos forestales, que supondrían una pérdidas de más de cien millones de euros con temor al hundimiento de precios de la madera.
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