Madrid.- La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), Elena Espinosa, ha anunciado hoy su intención de proponer a las Comunidades Autónomas dedicar el máximo presupuesto que permita la Unión Europea (UE) a la incorporación de jóvenes al campo.
Durante su comparecencia a petición propia, Espinosa ha explicado ante la Comisión de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Congreso los resultados de la reforma intermedia de la Política Agrícola Común, aprobada el pasado 20 de noviembre en Bruselas, y que "reconoce el carácter estratégico de la agricultura, fortalece la actividad económica agraria y consolida las ayudas directas a los agricultores".
Espinosa ha reiterado que se partía de una propuesta muy restrictiva que se ha mejorado para atender a los intereses de la agricultura española, dejando una red de seguridad que contempla mecanismos de intervención de mercados y manteniendo la ficha presupuestaria en 5.200 millones de euros para España.
Ha apuntado también que la reforma permitirá hacer uso de los fondos que quedan sin utilizar y que representan hasta un 4 por ciento del sobre nacional de ayudas directas, lo que para España podrá suponer el aprovechamiento de hasta 200 millones de euros al año.
Espinosa, a preguntas del grupo popular, ha hecho hincapié en que la aplicación del artículo 68 de la PAC no supone una detracción de fondos agroganaderos para pasarlos a desarrollo rural, sino que redundarán en apoyos al propio sector productor porque sin él no se vertebra el mundo rural.
Ha señalado que en la reserva nacional láctea, gracias a los incrementos de cuota y a los planes de abandono, hay un total de 320.000 toneladas, que de momento no se repartirán porque ni el sector ni las CCAA han considerado oportuno repartirlas para no incentivar la producción en plena caída de precios.
Espinosa ha resaltado como un logro que se hayan mantenido mecanismos de intervención como los referidos a la leche en polvo o la mantequilla, en los que se ha partido de una propuesta muy restrictiva y además se ha logrado unos fondos específicos para potenciar la competitividad del sector lácteo y apoyar a las explotaciones de montaña.
El diputado del Grupo Popular, José Ignacio Llorens, ha calificado el resultado de la reforma como un "auténtico fracaso", ya que contempla un incremento de la modulación al 10% que supondrá una merma de los apoyos al sector agroganadero de 163 millones de euros en favor del desarrollo rural.
El portavoz socialista, Alejandro Alonso, ha valorado la reforma aprobada porque mejora sustancialmente las propuestas iniciales de la UE, y aunque "no se ha podido conseguir todo" sí se ha logrado el mantenimiento de una red de seguridad y mecanismos de intervención adecuados para la gestión de crisis.
Desde el Grupo Mixto, la diputada Olaia Fernández Dávila ha reiterado que se había perdido la oportunidad para apostar por un sector estratégico y competitivo y se deja la alimentación europea en manos de un mercado manipulado.
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