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El Plan de Vivienda se enfrenta a la crisis con medidas polémicas

  • Limita a 30 metros cuadrados la superficie mínima para que un piso sea protegido
  • Recomienda que el esfuerzo para comprar no exceda de un tercio de los ingresos
  • Aumenta el límite máximo para acceder a las ayudas
Por GEMA FERNÁNDEZ (SOITU.ES)
Actualizado 27-10-2008 17:59 CET

MADRID.-  Precedido de la polémica por los rumores sobre la 'resurrección' de los 'minipisos' —una idea que lanzó su antecesora en el cargo, María Antonia Trujillo, y que fue un rotundo fracaso— y el recorte de las ayudas, hoy se ha presentado el borrador del Plan de Vivienda 2009-2012. El documento, que marcará la política de vivienda de los próximos cuatro años, se pretende aprobar en la próxima reunión del Ministerio con las comunidades autónomas, prevista para el 5 de noviembre en Barcelona. Nosotros te contamos las novedades que plantea.

    Límites en superficie

  • El borrador del Plan establece que la superficie mínima de los pisos protegidos será de 30 metros cuadrados para un máximo de dos personas (antes el límite estaba en los 70 metros cuadrados), siendo ampliable en 15 metros cuadrados por cada nuevo individuo que se incorpore a la unidad familiar. El requisito se aplica a todas las modalidades de vivienda protegida, tanto en régimen de compra como de alquiler, y afectará a los pisos nuevos y a los usados.
  • Así, los pisos con menos de 30 metros cuadradados no recibirán ayudas estatales, pero sí lo harán aquéllos que superen los 90 metros. Eso sí, sólo a partir de 2009 y en la parte proporcional a esa superficie, el resto corre a cargo del beneficiario de la ayuda. No obstante, son las comunidades autónomas quienes tienen potestad para decidir las superficies mínimas y máximas de las VPO.

    En cuanto al revuelo despertado en torno a la posibilidad de construir viviendas de 15 metros cuadrados, queda resuelto. Corredor ha explicado que los 15 metros cuadrados se refieren a "alojamientos temporales, no viviendas", que se encuentran en edificios residenciales que comparten zonas comunes, y destinados a estudiantes y científicos que vivan solos. A las parejas y familias con hijos se les reservarán espacios más amplios, y siempre pensando en que se trata de algo temporal.

    Ayudas para más colectivos

  • Por otro lado, la nueva política amplía el abanico de adjudicatarios de las subvenciones. Así, podrán beneficiarse de la 'generosidad' del Gobierno las familias que ingresen hasta 4,5 veces el IPREM, lo que en la práctica significa que aquellos que ganen 6.200 euros al año más del límite establecido en la actualidad (21.710 euros/año), tendrán derecho a los 4.000 euros de la ayuda directa a la entrada (AEDE), reservados hasta ahora a las familias que ingresaban menos de 3,5 veces el IPREM —los 21.710 euros/año a los que nos referíamos antes—.
  • Además, hasta el 31 de diciembre de 2009 podrán adquirir VPO calificadas como "de precio concertado" las familias cuyos ingresos no excedan de 7 veces el IPREM, es decir, que ganen hasta 43.420 euros/año. El objetivo de esta medida es facilitar el acceso a la vivienda a esas rentas que hasta ahora no podían acceder a la vivienda protegida porque excedían el límite de ingresos, pero que tampoco podían comprar un piso en el mercado libre porque no les llegaba.

  • El documento especifica también la obligatoriedad de crear registros regionales de demandantes, al objeto de "combatir el fraude en las ayudas", que tendrán que estar operativos dentro de un año. Esto significa que si quieres acceder a una VPO deberás aparecer en la lista que elabore tu Gobierno regional.
  • Además, se apuesta por la vivienda protegida en régimen de alquiler con opción a compra, una iniciativa que puso en marcha la Comunidad de Madrid en 2005 y que ha sido trasladada con éxito a las políticas de muchas otras comunidades autónomas, hasta llegar al borrador estatal. Consiste en ofertar viviendas en alquiler durante 10 años, que pasado ese periodo podrán ser adquiridas a precio protegido y descontando una parte proporcional de lo invertido en el alquiler.
  • También cobran gran importancia en este programa las ayudas a la rehabilitación.
  • Contradicciones

  • Y entre tantas novedades, una recomendación no exenta de polémica. Corredor pide a los gobiernos autonómicos que no olviden que el esfuerzo económico medio de los demandantes de vivienda acogidos al Plan "no debería superar la tercera parte de sus ingresos". Teniendo en cuenta que un piso protegido medio de 90 metros cuadrados tiene actualmente un precio de 100.100 euros, y que con una hipoteca a 30 años y el tipo de interés oficial que establece el Plan de Vivienda vigente (del 5,1%) supondría una cuota mensual cercana a los 600 euros/mes; en la práctica, esto significa que los demandantes cuyo salario mensual no alcance los 1.500 euros (más del doble del salario mínimo) no podrán comprarse una VPO.
  • Esto choca frontalmente con los objetivos del Plan, que pretende llegar al máximo número de ciudadanos posible.

¿De dónde vendrá la VPO?

Pero la vivienda protegida tiene que salir de alguna parte. Y el Ministerio pretende que ésta se pueda obtener tanto en nuevas promociones como por la reconversión del parque existente, cuyo stock Corredor ha cifrado en unas 700.000 ó 900.000 unidades a final de año. Así, el borrador permite la transformación en viviendas protegidas de precio concertado aquellas casas libres que tengan una licencia de obras emitida "no más tarde del 1 de septiembre de 2008".

En cuanto a las nuevas promociones, Sepes abrirá mañana la oferta pública de compra de suelo privado. Los interesados tienen hasta el próximo 29 de diciembre para presentarse, y entre los requisitos a cumplir deberán tener en cuenta lo siguiente:

  1. Las parcelas ofrecidas deberán tener una superficie que permita la construcción de al menos 300 viviendas, con la excepción de Ceuta y Melilla, donde el mínimo será de 150 viviendas.
  2. Los solares deberán encontrarse en municipios con más de 20.000 habitantes, y preferentemente en zonas urbanas.
  3. Sepes se encargará de la urbanización.
  4. El suelo se pagará a precio protegido.

Una vez que concluya el plazo de presentación de ofertas, Sepes tendrá cuatro meses para estudiar y seleccionar las ofertas. Esto significa que aún queda más de un año para que las nuevas VPO vean la luz.

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