Santander.- Las denuncias por beber alcohol en la calle han aumentado en Santander un 70 por ciento en lo que va de año respecto a los ocho primeros meses de 2007, según los datos que ha ofrecido hoy el alcalde, Íñigo de la Serna, quien ha anunciado un protocolo de colaboración con la Delegación del Gobierno para atajar este problema.
Ese es uno de los acuerdos que ha adoptado hoy la Junta de Seguridad Local, que se ha reunido, a solicitud del Ayuntamiento, para estudiar actuaciones conjuntas contra el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública.
En la reunión, a la que ha asistido el delegado del Gobierno, Agustín Ibáñez, y los jefes de las Policías Local y Nacional, Luis Fernández y Pilar Ayué, se ha decidido además la adhesión de Santander al protocolo acordado en el seno de la Federación de Municipios y Provincias para la protección de las víctimas de la violencia doméstica.
Las denuncias por beber alcohol en la calle se elevaron en 2007 a 714 y en lo que va de año (hasta el 31 de agosto) ya casi se ha alcanzado esa cifra. En ese periodo se han puesto 696, lo que supone un incremento del 70 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
Para luchar contra ese consumo, que es ilegal según la normativa vigente en Cantabria, se redactará un protocolo de actuaciones conjuntas. Con ese objetivo se creará una mesa de coordinación en la que estarán presentes responsables de la Policía Local, el Cuerpo Nacional de Policía, el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno.
Dentro de esta actuación, se hará un diagnóstico de la situación que incluirá un mapa de los lugares de la ciudad donde se bebe y que presentan "distintas problemáticas", ha apuntado el alcalde.
Agustín Ibáñez ha hecho hincapié en la disposición de la Delegación del Gobierno a aumentar la cooperación con el Ayuntamiento, que en este terreno se ha traducido en 2008 en 70 dispositivos conjuntos.
La Policía Local es la encargada del control del consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, una labor que se complementa con distintas actuaciones como las campañas de sensibilización, los programas de ocio alternativo, las actuaciones preventivas y los controles de alcoholemia.
De enero a agosto, han sido denunciados 714 conductores por alcoholemias positivas, ha señalado De la Serna.
Santander adaptará a sus necesidades el protocolo de cooperación policial para proteger a las víctimas de la violencia doméstica que se aprobó en la FEMP en 2006. Ese protocolo específico para el municipio empezará a aplicarse en 2009.
En él se recogerá cómo tienen que actuar tanto la Policía Local como la Nacional desde el momento en que se recibe una denuncia.
En Santander hay ahora mismo 265 mujeres con una orden de protección y de ellas, 104 cuentan con el servicio de teleasistencia.
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