Granada.- Los camioneros han recurrido hoy a concentraciones, cortes de carreteras y manifestaciones en una jornada tensa en la que han querido homenajear a su compañero Julio Cervilla Sojo, atropellado mortalmente ayer por una furgoneta a cuyo conductor interceptó en el mercado de mayoristas de Granada.
Aunque los chóferes granadinos pretendían organizar una manifestación con sus vehículos, a los que estaba previsto que se unieran otros llegados desde Almería y Jaén, al no estar autorizada por la Subdelegación del Gobierno y ante el fuerte dispositivo de las fuerzas de seguridad del Estado han tenido que improvisar otras acciones de protesta.
Los transportistas quedaron involuntariamente divididos en dos grupos repartidos entre Mercagranada y en la venta de La Nava (Iznalloz), y en ambos casos la Subdelegación les prohibió entrar a la capital con sus vehículos.
En la venta se han reunido un centenar de camiones y unas 200 personas, que han cortado a pie hasta en dos ocasiones la A-44 en sentido Granada durante un total de una hora, una de las cuales fue reprimida por los agentes del Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil, ha presenciado Efe.
Sólo interrumpieron la concentración para desplazarse a Peligros, donde a las 19.00 horas se ha oficiado la misa funeral por Julio Cervilla Sojo con la asistencia de más de medio millar de personas, la mayoría de ellas transportistas.
Los que desde primera hora de la mañana se quedaron en Mercagranada optaron por una manifestación por las principales calles de la capital granadina que sumó a más de un centenar de camioneros, precedidos por dos cabezas tractoras.
Esta marcha, que fue autorizada por la Subdelegación del Gobierno, partió sobre las 14:00 horas de la zona de La Caleta y recorrió la Avenida de la Constitución y la Gran Vía de Colón, para finalizar en la calle Reyes Católicos, a la altura de la plaza del Carmen, donde está el Ayuntamiento, a las 15:30 horas.
Las dos cabinas tractoras que abrían la marcha portaban crespones negros y una pancarta en la que podía leerse "Hoy todos somos Julio, tus compañeros no te olvidaremos", mientras que los manifestantes estuvieron en todo momento custodiados por una importante dotación del Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local de Granada.
En algunos momentos también se ha guardado un minuto de silencio en memoria del camionero fallecido y, aunque no se han producido incidentes de gravedad, sí se han vivido múltiples momentos de tensión durante la jornada.
La mayoría de los transportistas que han participado en esta jornada entre reivindicativa y de homenaje a Julio Cervilla Sojo acudieron después a la misa funeral celebrada en la iglesia Virgen del Rosario de Peligros, localidad del cinturón metropolitano granadino en la que vivió más de 20 años.
Un centenar de camioneros escoltó el féretro de su compañero en su traslado del tanatorio a la iglesia, trayecto en el que fue recibido con lágrimas, aplausos y gritos con su nombre.
Julio Cervilla Sojo, cuyos restos mortales han sido incinerados en Albolote, donde residía desde hace unos años, estaba separado, tenía tres hijas y una nieta y ha sido descrito por sus conocidos como "sencillo, trabajador y poco conflictivo".
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