Y tan malo como el bisturí es el solarium. Por un lado estirarse y por el otro dejarse devorar por los rayos UVA. Al final pasa lo que pasa, y eso es lo que le pasó al diseñador italiano, Valentino Caravani y a su pareja Giancarlo Giammetti. Que no se sabe si son ellos o los que han ido a la 'mostra' son sus figuras del Museo de Cera.