Tren de alta velocidad entre Pekín y Tianjin alcanza su media de pasajeros

Pekín.-  El tren de alta velocidad que conecta Pekín con Tianjin, donde se celebrarán las pruebas olímpicas de fútbol, ha alcanzado ya el promedio de pasajeros diarios previsto, con unos 14.000, dijo hoy a Efe la Administración de Ferrocarriles de Pekín.

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(EFE)

Dos oficiales paramilitares chinos montan guardia en una estación de tren en Pekín.

"Desde que entró en funcionamiento, hemos alcanzado el promedio diario de pasajeros que habíamos previsto", señaló a Efe un portavoz de esta administración.

El "CRH-2" (China Railway High Speed, de fabricación china) que conecta Pekín con la ciudad portuaria, entró en funcionamiento el 18 de abril de 2007 y cada vez adquiere más velocidad.

Cada tren cuenta con una media de 12 vagones que pueden alojar a un total de 1.200 pasajeros, y cada día transitan entre las dos municipalidades 12 trenes de ida y vuelta, lo que sitúa la capacidad diaria en 14.400 viajeros.

Aunque el modelo está diseñado para alcanzar una velocidad de entre 200 y 250 kilómetros por hora en este trayecto, en la actualidad está rodando a un máximo de 165 kilómetros por hora, según pudo comprobar Efe, lo que reduce el trayecto de 115 kilómetros que separa las dos ciudades a menos de una hora.

El "tren bala" no alcanzará la duración de trayecto prevista para agosto, de media hora, hasta que finalicen las obras en las vías y en la nueva estación de Tianjin, que acogerá a los visitantes olímpicos, y se instale el siguiente modelo, el "CRH-3".

Por una media de 4 euros (6 dólares) por trayecto, el viajero disfruta de un entorno de primera clase, con servicio de azafatas y mozos que sirven bebidas a bordo, vagón-restaurante y servicios bilingües (chino e inglés).

Cincuenta y nueve trenes "CRH-2" circulan en la actualidad en los trayectos Pekín-Tianjin, Pekín-Harbin (noreste), Pekín-Shanghai (este) y Pekín-Cantón (sur).

Pero la estrella en la carrera velocista china es el "CRH-3", el primer tren de alta velocidad creado por el país asiático y que aspira a competir con el más rápido del mundo, el TGV francés (320 kilómetros por hora) cuando alcance su máxima velocidad, de 300 kilómetros por hora, que iguala al modelo japonés.

La producción de este modelo se inició en diciembre pasado y está previsto que Sifang Locomotive and Rolling Stock Co Ltd, con sede en Qingdao (provincia oriental de Shandong) y filial de China Southern Locomotive and Rolling Stock Industry (Group) Corporation, entregue 10 unidades de este modelo en el actual semestre.

El aerodinámico tren, fabricado con una aleación de aluminio, es el más ligero de su tipo en todo el mundo, con siete toneladas de peso y un grosor mínimo de 1,5 milímetros, según presumen desde el Gobierno.

"China se ha unido al club de elite mundial formado por Japón, Francia y Alemania, al convertirse en el cuarto país capaz de alcanzar estas velocidades en sus trenes", señaló en diciembre el Ministerio de Ferrocarriles.

Cuando este último modelo se instale en las vías que unen Pekín y Tianjin, antes de la cita olímpica, podrá acoger a 600 pasajeros.

En la actualidad circulan por la red china, la mayor del mundo, tres modelos de CRH: el 1, el 2 y el 5.

Aunque el gobierno se vanagloria de que un 80 por ciento de los componentes son producción nacional, lo cierto es que en cada uno de estos modelos han participado multinacionales extranjeras como la canadiense Bombardier, la japonesa Kawasaki, la francesa Alstom y la alemana Siemens, según reconoció el viceministro de Ferrocarriles, Hu Yaodong.

Sin embargo, el éxito de CRH no radica en la importación: "La clave para la producción de equipos de alta tecnología es la auto-innovación", explicó a "Beijing Review" Wang Jun, vicepresidente de CSR Sifang Locomotive.

"Recibimos 60 unidades de los CRH-2 en octubre de 2004. Entonces sabíamos claramente que había enormes abismos en investigación y desarrollo y en nivel tecnológico entre China y las principales potencias", explicó Wang.