Pamplona.- El delantero portugués de Osasuna, Eduardo Fernandes 'Dady', vislumbra el final del túnel, tras una aciaga temporada durante el pasado ejercicio, al reencontrarse con el gol ante el Xerez en el partido de ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.
Dady, que no ha disputado ningún minuto de Liga esta campaña por las lesiones, jugó anoche en Chapín sus primeros minutos en competición oficial esta temporada y, aunque no lució en exceso, cumplió en su vuelta al equipo al marcar uno de los dos goles de Osasuna, que dejan encarrilada la eliminatoria a los 'rojillos'.
El internacional por Cabo Verde fue la sorpresa introducida por José Antonio Camacho en el once inicial y Dady respondió a la confianza depositada en él con un gol que le hace albergar esperanzas de entrar en la dinámica del equipo tras más de medio año en el dique seco después de detectarle en abril un tumor óseo benigno en el fémur izquierdo.
Dady padeció una complicada temporada 2008/09, en la que únicamente pudo jugar 656 minutos en 14 partidos de Liga, con 3 goles en su haber.
El delantero portugués, más allá de las decisiones técnicas, no tuvo acceso a la continuidad en el juego al enlazar tres lesiones musculares: dos roturas en el bíceps femoral derecho en octubre y en diciembre, y una elongación en el cuádriceps izquierdo a finales del pasado mes de marzo.
Precisamente, esta lesión y las pruebas realizadas para comprobar la evolución de la misma permitieron a los servicios médicos del club detectarle en abril un quiste óseo aneurismático trocánter mayor del fémur izquierdo.
Después de un largo proceso de recuperación, Dady empezó la actual temporada con nuevos ánimos, pero de nuevo la mala suerte se cebó con él al sufrir a mediados de septiembre una nueva rotura en el bíceps femoral derecho.
El internacional caboverdiano recibió hace una semana el alta médica tras cinco semanas de baja y, ayer, en su reestreno con la camiseta 'rojilla', saboreó no sólo la victoria con su equipo, que le deja cerca de los octavos de final de la Copa del Rey, sino la satisfacción personal de reencontrarse con el gol.
Aunque Camacho confía de momento de forma plena en el dúo atacante formado por el malagueño Carlos Aranda y el uruguayo Walter Pandiani, el regreso de Dady es una buena noticia para Osasuna, que tuvo al portugués en su máximo goleador hace dos temporadas, con 7 goles.
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