Huelva.- Las autoridades de Guinea Bissau mantienen retenidos desde el pasado 9 de octubre a tres barcos pesqueros con base en Huelva acusados de repostar gasóleo en alta mar, una práctica que los armadores defienden como "algo habitual".
Los tres pesqueros son el "Sierra de Huelva", de la empresa Baltimar, el "Febel III", de Mariscos Rodríguez -ambos con base en Huelva-, y el "Alfonso Riera I", de una empresa del mismo nombre de Lepe.
En declaraciones a Efe, José Antonio Fernández, patrón del "Ferber III", ha indicado que el abordaje y detención de las embarcaciones se produjo en torno a las 4:00 de la madrugada del 9 de octubre.
Según su versión, los militares guineanos subieron a bordo a unas 148 millas de la costa y aunque "todo estaba correcto, nos obligaron, sin explicación, a poner rumbo a la costa".
Desde el 10 de octubre permanecen fondeados a 500 metros de la costa de Bissau, y según han confirmado las tripulaciones -compuestas por unas 50 personas, una quincena de ellas de nacionalidad española-, están bien y en todo momento custodiados por militares.
Las autoridades de Guinea acusan a estas tres embarcaciones de una infracción por realizar un 'bunkering' o repostaje de gasóleo en alta mar y les han impuesto una sanción de 150.000 dólares a cada una, multa que los armadores no entienden puesto que se trata "de una práctica habitual que se ha realizado desde siempre y sin problemas", según Fernández.
En este sentido, el armador del "Sierra de Huelva", Ángel Muriel, ha reclamado que se ponga en marcha "una gestión directa bilateral" entre los Gobiernos de España y Guinea para permitir el regreso de los barcos "apelando a las buenas relaciones existentes entre ambos países".
Por su parte, el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) ha asegurado que trabaja con la Unión Europea (UE) y Guinea Bissau para resolver la situación de los tres barcos retenidos.
Asimismo, ha señalado que el acuerdo de pesca entre la UE y Guinea Bissau no contempla las operaciones de transbordo de combustible y ha precisado que los buques españoles faenaban al amparo de este acuerdo y, "en consecuencia", la supuesta infracción administrativa "no es de naturaleza pesquera".
Fuentes comunitarias también han confirmado que la Comisión Europea (CE) "intervino" para que el apresamiento de los barcos hiciera "en condiciones razonables, respetando las condiciones que incluye el protocolo del acuerdo de pesca entre la Unión Europea (UE) y Guinea Bissau".
Las familias de los marineros siguen los acontecimientos con preocupación y Caridad de Dios, la mujer del patrón José Antonio Fernández, ha declarado: "Lo que estamos sufriendo sólo lo comprende el entorno del marinero, los de fuera menos".
Asimismo, ha lamentado que las autoridades no se hayan puesto en contacto con ellos en las dos semanas que llevan retenidos y se ha mostrado preocupada por que los marineros pueden llegar a tener problemas para alimentarse porque "tienen víveres, pero cada vez les quedan menos", además de dudar de la potabilidad del agua que les están suministrando.
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