Las Palmas de Gran Canaria.- El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Pérez, ha reclamado hoy diversas medidas, incluso legislativas y estructurales, para salvar a los Cabildos ante la caída de sus ingresos en un tercio a causa de la crisis y la imposibilidad que tienen de recaudar recursos propios.
"Hay que buscar una salida para evitar el desplome de las instituciones insulares", ya que su situación es de "cuasi quiebra técnica" en términos económicos, ha explicado Pérez en una reunión con directores de medios de comunicación de la isla.
El presidente del Cabildo expuso, por ejemplo, que su corporación insular registró en 2008 un 20 por ciento menos de ingresos que el año anterior frente a la previsión de incremento que era del 11%, mientras que para el 2009 se esperaba una reducción de ingresos solo del 3 por ciento y "vamos por el -30%".
Según Pérez, esta situación es común a los siete cabildos insulares de Canarias y las previsiones son malas, ya que para el próximo ejercicio 2010 se prevé que las corporaciones ingresen casi 146 millones de euros menos, una cantidad muy importante si se tiene en cuenta que el presupuesto global de todas ellas suman unos 1.600 millones de euros.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria expresó su temor de que la caída presupuestaria haga imposible que las corporaciones puedan cumplir con sus competencias y servicios.
Aunque esta situación ha aflorado con la crisis económica, Pérez aseguró que no se trata de un problema coyuntural, que no se había percibido antes debido a que se ha vivido con bonanza, sino que la solución pasa por la necesidad de una mejor regulación de la organización política administrativa de la comunidad autónoma de Canarias.
Por ello, demandó que a largo plazo se adopten medidas legislativas que desarrollen y clarifiquen el papel de los Cabildos insulares en el marco normativo autonómico, en el que actualmente no tienen potestad recaudatoria como la propia administración autonómica y la local.
Al mismo tiempo, Pérez reclamó medidas a corto y medio plazo que alivien la situación presupuestaria de las corporaciones insulares, como la distribución de los 250 millones de euros del extinto Impuesto General sobre el Tráfico de Empresa entre Cabildos y ayuntamientos.
El presidente insular grancanario apostó, asimismo, por la creación de una comisión entre la comunidad, cabildos y ayuntamientos para intervenir en la gestión de los recursos financieros derivados del llamado BFC (Bloque de Financiación Canario, que son los que aportan mayores ingresos para los Cabildos.
José Miguel Pérez afirmó que su defensa de superviviencia presupuestaria de los Cabildos no es un planteamiento partidista, sino de lealtad institucional, por lo que demandó a los partidos que logren llegar a un consenso político sobre este asunto en todas las instituciones canarias.
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