Pamplona.- El Pleno del Parlamento ha aprobado hoy por unanimidad de todos los grupos la Ley Foral de atención y apoyo a personas afectadas por catástrofes producidas por inundaciones, fuertes vientos y otros fenómenos naturales.
La Ley tiene por objeto definir el marco general de ayudas y beneficios a personas físicas y jurídicas que pudieran resultar afectadas por catástrofes generadas por inundaciones, fuertes vientos y otros fenómenos naturales, buscando con ello la "mayor agilidad posible en la tramitación de las ayudas".
Además, con carácter retroactivo y de manera excepcional, la Ley tiene en cuenta en todos sus extremos a los afectados por las inundaciones producidas en febrero de 2009 y por la granizada acaecida el pasado 30 de junio en los términos de Valdega, valle de Metauten y zonas de Allín y Améscoa.
Dado el caso, el Departamento del Gobierno competente en la materia será el encargado de dictar, en el plazo de un mes desde que se hayan originado los estragos, una orden foral donde se recoja la relación de municipios y vecinos afectados, juntamente con los plazos, requisitos y condiciones de las ayudas a las que puedan acogerse.
Dicha orden Foral será "ratificada" por acuerdo en la primera sesión de gobierno que se celebre.
Se exceptúa la regulación de los beneficiarios de las ayudas a establecer para los afectados por las inundaciones de febrero de 2009 y la granizada del 30 de junio, que se realizará mediante orden foral en el plazo de un mes "a partir de la entrada en vigor" de la presente Ley Foral.
En cuanto a la naturaleza de las ayudas, se contemplan "exenciones fiscales o impositivas" para los titulares de los bienes inmuebles afectados, que quedarán liberados del pago de las contribuciones Territorial Urbana y Rústica correspondientes al año en que se haya producido la catástrofe.
También hay exenciones para las actividades perjudicadas, que serán exoneradas del pago del Impuesto de Actividades Económicas y podrán ser liberadas también del Impuesto de Construcciones Obras e Instalaciones e, incluso, ser compensadas con la reposición o reconstrucción de lo dañado.
Además, los sujetos pasivos que, teniendo derecho a esa exención, hubieran satisfecho algún recibo correspondiente al ejercicio en que se hubiera producido la catástrofe, "podrán solicitar la devolución" de las cantidades pagadas.
En los casos de daños en infraestructuras y equipamientos públicos, las entidades locales afectadas tendrán "prioridad" en el otorgamiento de ayudas, con el fin de reconstruir o reparar los elementos dañados, incluidas las mejoras necesarias para evitar nuevos daños por los mismos motivos.
La disminución de ingresos que, como consecuencia de la aplicación de esta norma, se produzca en los ayuntamientos será compensada de conformidad con el procedimiento regulado en los decretos forales de 1998 y 2003, y con cargo a los Presupuestos Generales de Navarra.
Por último, se advierte que las ayudas establecidas en la presente Ley Foral tendrán carácter "complementario y subsidiario", por este orden, de las compensaciones de las pólizas de los seguros suscritos, así como de otras ayudas que, para situaciones similares, pudieran existir en el ámbito nacional o de la Unión Europea.
Fijada la unanimidad del apoyo, por UPN, Jerónimo Gómez ha considerado "positiva" la ley y ha augurado una mejoría en la respuesta ante este tipo de catástrofes, ya que "sin ella hemos dado ejemplo de cómo se debe actuar; de forma ágil con los medios que teníamos".
Maiorga Ramírez, de Nafarroa Bai, ha recordado que la idea inicial de una ley así fue de su grupo, si bien concretada en los daños producidos el pasado mes de febrero por las inundaciones en el norte de Navarra, por lo que ha valorado que ahora, mediante la iniciativa recogida por PSN se haya extendido a toda la comunidad los beneficios que plantea.
Al respecto, Amanda Acedo (PSN) ha lamentado la "visión puramente territorial" que a su juicio mueve a NaBai por fijarse en el norte de la Comunidad foral cuando también el sur está expuesto a estas eventualidades, ha dicho para defender la ley con el objetivo de dar "inmediatez e igualdad en la respuesta de la administración a todos los ciudadanos de la Comunidad foral".
Por CDN José Andrés Burguete ha reconocido como "positivo" un texto que permitirá "actuar con un procedimiento rápido y eficaz" para paliar los daños de los desastres naturales y que tiene "vocación de permanencia en el tiempo" por tratarse de una ley, que ahora deberá desarrollarse.
En la misma línea, Ana Figueras (IUN) ha valorado que con esta ley se consigue que los municipios tengan recursos suficientes ante eventualidades meteorológicas o de otro tipo "sin tener que estar mendigando la limosna correspondiente cuando se ven desbordadas sus posibilidades".
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