Houston (EEUU).- La competición de octubre del béisbol de las Grandes Ligas comenzó a dejar las mejores emociones que se dan en el deporte pasatiempo nacional, con el venezolano Yorvit Torrealba, el abridor John Lackey y el jardinero Matt Holliday de protagonistas.
Torrealba con un jonrón de dos carreras se iba a convertir en el salvador de los Rockies de Colorado que ganaron a los Filis de Filadelfia y empataron a 1-1 la serie de división de la Liga Nacional.
Mientras que Lackey lanzó su mejor pelota para silenciar por completo a la artillería pesada de los Medias Rojas de Boston y darle el primer triunfo a los Angelinos de Los Ángeles en la serie de división de la Liga Americana.
Pero la jornada también dejó un villano, al jardinero Holliday, que cometió un error de fildeo que no sólo le costó la derrota a su equipo de los Cardenales de San Luis frente a los Dodgers de Los Ángeles sino que los dejó al borde de la eliminación de la serie de división de la Nacional.
Torrealba terminó la jornada satisfecho por haber ayudado a que los Rockies venciesen 5-4 a los Filis y lograsen empatar a 1-1 la serie que disputan al mejor de cinco.
El abridor estelar de los Filis, Cole Hamels, no pudo ir a acompañar a su esposa Heidi en el parto de su primer hijo con la alegría del triunfo porque Torrealba le conectó el jonrón que abrió el camino del triunfo de los Rockets y lo dejó con la derrota.
Torrealba conectó un jonrón de dos carreras para darle toda la ayuda que necesitó el abridor Aaron Cook, que se quedo con el triunfo después de lanzar seis entradas con efectividad.
"Esto es muy bueno para el equipo", declaró Torrealba. "Ahora volveremos a Denver. Nuestra meta era ganar al menos un juego aquí en Filadelfia y lo hicimos".
Hamels, nombrado el Jugador Más Valioso (MVP) de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional el año pasado y de la Serie Mundial, no se pareció en nada al que hizo posible que los Filis fuesen los campeones del Clásico de Octubre.
El zurdo estelar de los Filis cedió cuatro carreras y siete imparables antes de abandonar el Citizens Bank Park, para ir al encuentro de su esposa, una ex modelo de la revista "Playboy", con la que esperan su primer hijo del matrimonio.
El manejador de los Filis, Charlie Manuel, reconoció que la situación no era la más común que se da durante un partido de béisbol.
"Quizá sí lo distrajo", comentó Manuel. "Estaba preocupado por su esposa e hijo. Es un momento emocionante, algo que uno ansía, y probablemente pensaba en eso".
El cerrador Huston Street salió en el noveno capítulo para asegurar el triunfo de Colorado después de retirar a Shane Victorino con una línea suave a la segunda para dejar en la intermedia la anotación del empate con el abridor Cliff Lee, ganador del primer juego, que salió como corredor emergente.
La competición se reanudará el próximo sábado en Denver, donde se disputará el tercer partido con Jason Hammel (10-8) que abrirá por los Rockies, que llegaron a la fase final como ganadores del comodín de la Liga Nacional.
Mientras que los Filis, campeones de la División Este, no han confirmado quién será su abridor, pero podrían recurrir a Joe Blanton, a J.A. Happ o al veterano dominicano Pedro Martínez.
Si en Filadelfia se impuso el bateo oportuno, en Anaheim, Lackey lanzó pelota ganadora hasta la octava entrada y el jardinero central Torii Hunter conectó un cuadrangular para que los Angelinos ganasen por blanqueada de 5-0 a los Medias Rojas en el partido inaugural de la serie de división de la Liga Americana.
Hunter rompió el empate en un juego sin anotaciones y pareció derribar cualquier barrera mental que pudieran tener los Angelinos al enfrentar a los Medias Rojas, quienes terminaron tres de las cinco últimas temporadas del californiano en las series de división, con nueve triunfos de 10 partidos.
Esta vez, los Medias Rojas no fueron capaces de conectar un imparable de extra base y fueron blanqueados por primera vez desde el segundo de la serie de división que disputaron, en 1995 contra los Indios de Cleveland.
El segundo partido se jugará hoy, viernes, por la noche en el Angel Stadium, con Josh Beckett, de abridor para los Medias Rojas, y Jered Weaver, que lo hará con los Angelinos.
Gracias al brazo de Lackey, los Angelinos, campeones de la División Oeste de la Liga Americana, rompieron una racha de seis derrotas consecutivas en la fase final.
Lackey dominó en su primer triunfo en "playoffs" desde el 2002 con una gran serpentina, además de tener el respaldo de buena defensa y bateo oportuno.
Después de ponchar a cuatro bateadores y permitir cuatro sencillos en siete entradas y un tercio, se quitó la gorra para agradecer una ovación de pie de los aficionados.
Jon Lester recibió cuatro imparables en seis episodios por los Medias Rojas, que habían ganado cinco primeros juegos de postemporada seguidos.
Lester no estuvo tan brillante como Lackey en apenas su segunda derrota desde el 19 de julio, pero evito problemas hasta el quinto capítulo, luego todo fue diferente.
El dominicano Erick Aybar comenzó el ataque con un doblete al inicio de la entrada hacia el jardín izquierdo.
Después de una base por bolas al venezolano Bobby Abreu, Hunter conectó el segundo lanzamiento de Lester por encima de la valla par irse al montículo de rocas artificiales tipo escenario de Disneyland, saliendo fuegos artificiales de éste al momento del impacto de la pelota.
Pero si hubo una jugada que de verdad causo impacto y dio la vuelta no sólo al marcador final sino también a la marcha de la serie fue el error cometido por Holliday, que todo lo que tenía que hacer era atrapar una línea potente, pero de rutina, para que los Cardenales empataran la serie.
Sucedió todo lo contrario, llego el error no el "out" número 27 y permitió a los Dodgers dejarlos con vida y una segunda oportunidad para ganar el partido por 3-2, con dos anotaciones en el noveno episodio, y ponerse 2-0 arriba en la serie al mejor de cinco juegos.
El dominicano Ronnie Belliard y el emergente Mark Loretta pegaron sendos sencillos productores frente al cerrojero Ryan Franklin, lo que puso a los Dodgers a las puertas de la Serie de Campeonato, cuando el sábado lleguen a San Luis para el tercer juego.
Holliday había aportado un jonrón en el segundo episodio, y los Cardenales habían tenido también el apoyo del abridor Adam Wainwright, quien destacó en el montículo y lo abandonó con una ventaja de 2-1 después de ocho entradas.
Pero los Cardenales regresan a su campo con las manos vacías pese a tener a dos candidatos al trofeo Cy Young, como Chris Carpenter y Wainwright de abridores en los dos primeros partidos.
"Ahora nos sentimos decepcionados y molestos", admitió Tony LaRussa, piloto de los Cardenales. "Justo ahora creo que es importante enojarnos, de lo contrario parecería que esto no nos importa".
Sin embargo, Loretta, el veterano emergente que pegó el imparable impulsador de la carrera del triunfo, advirtió que los Cardenales todavía no habían dicho la última palabra.
"Esta serie no ha concluido. San Luis es un equipo muy talentoso, que va a dar toda la pelea que pueda", advirtió Loretta, de 37 años.
Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »
En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.
Subir al principio de la página
Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.