Santa Cruz de Tenerife.- La consejera de Agricultura del Gobierno de Canarias, Pilar Merino, advirtió hoy de que la reducción del arancel del plátano supondrá desmontar el actual sistema de ayuda a la producción comunitaria.
Pilar Merino, que compareció a instancias de CC ante el pleno del Parlamento de Canarias, aludió a la situación de incertidumbre que atraviesa el sector por la negociación que se lleva a cabo para la liberalización del comercio con los países iberoamericanos.
Recordó que el descreste arancelario comienza el 1 de enero de 2010 y sitúa la cantidad a pagar por la producción de terceros países en 148 euros por tonelada frente a los 176 euros actuales.
Merino indicó que en el segundo año el descreste se sitúa en 143 euros y en tercer año en 136 euros para finalizar en el octavo año con un arancel de 114 euros.
La consejera insistió que se trata de un descreste muy importante que pone en peligro todo el sistema de ayuda al plátano que se acordó en torno a un arancel de 176 euros por tonelada.
Pilar Merino recordó la importancia del sector platanero en Canarias con una producción de 400.000 toneladas, con 10.300 productores y la ocupación de 15.200 empleos directos y más de 2.000 indirectos.
La consejera insistió en la necesidad de defender que la reducción del arancel sea mínimo, lo que permitirá mantener las ayudas a los productores.
Reconoció la situación difícil de incertidumbre que atraviesa el sector, y estimó que durante su presidencia comunitaria el Gobierno español defienda los derechos de la producción platanera española, que es la más importante de Europa.
Indicó que se ha tratado de trasladar a las autoridades europeas la preocupación del sector y desde el Gobierno de Canarias se han propuesto medidas concretas como la subvención del cien por ciento del coste del transporte.
De cualquier forma afirmó que ninguna medida tendrá efecto si se produce una reducción estrepitosa del arancel o no se adecúa un sistema compensatorio para el sector.
Beatriz Acosta, de CC, dijo que lamentablemente los problemas del sector no se han solucionado y actualmente se encuentra en una grave situación.
Acosta lamentó la posición del Gobierno central porque parece que es el promotor del acuerdo con los países iberoamericanos al tiempo que fomenta la producción del banano en África, mientras que no se toman medidas para prevenir las gravísimas consecuencias que tendrán en la producción canaria.
La parlamentaria consideró que se trata de una irresponsabilidad y señaló que el sector no puede competir con un mercado liberalizado.
Cristina Tavío, del grupo Popular, dijo que la unidad del sector ha sido el mejor aliado en la defensa de este producto, y manifestó que de todas las batallas se ha salido bien aunque advirtió de que la situación novedosa en la actualidad es la competencia al plátano se la está haciendo el propio Gobierno español.
Tavío afirmó que el Gobierno español no puede gastar ni un euro en financiar explotaciones en otros países, tal y como hace, dijo, en Senegal o en República Dominicana.
Manuel Marcos Pérez, del grupo Socialista, dijo que el Gobierno español ha liderado en el seno de la Unión Europea la defensa de un sector estratégico y clave para la economía canaria, y rechazó los argumentos "demagógicos" que dicen lo contrario.
Además señaló que esta negociación se desarrolla en el seno de la Unión Europea y por eso el presidente José Luis Rodríguez Zapatero está desde un principio implicado y ha defendido al sector "en todos los foros donde había que defenderlo".
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