Naciones Unidas.- El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció hoy que iniciará una gira por Oriente Medio el 14 de noviembre y ofreció todo el apoyo de España y de la UE a la estrategia del Gobierno de EEUU para alcanzar la paz en la región.
Zapatero, que ejercerá de presidente de turno de la Unión Europea en el primer semestre de 2010, dio hoy una rueda de prensa en la sede de Naciones Unidas, en la que se mostró convencido de que "España puede aportar mucho (en el proceso de paz en Oriente Medio) y la UE tiene la obligación de hacerlo".
Un mes antes de la gira, Zapatero viajará a Washington para reunirse con el presidente de EEUU, Barack Obama, el 13 de octubre.
La gira de Zapatero comenzará en Siria y previsiblemente acabará en Líbano, pasando por Israel y por los territorios palestinos.
Será la segunda ocasión en la que Zapatero viaje a Oriente Medio, después de que estuviera en Jerusalén en enero pasado junto a otros líderes europeos, tras participar en una conferencia internacional sobre Gaza, que se celebró en la localidad egipcia de Sharm el Sheij.
"Oriente Próximo sigue siendo el gran tema, la gran asignatura pendiente del mundo para fortalecer su estabilidad y su seguridad", subrayó.
Zapatero avanzó que en la reunión que mantendrá el 13 de octubre con Obama le expondrá las iniciativas que pueden llevar a cabo la UE y España para respaldarle para alcanzar la paz en Oriente Medio.
Europa y España van a "apoyar y compartir esta ofensiva en favor de la paz", insistió tras recordar que el primer e "incipiente" paso en esa dirección tuvo lugar el martes en Nueva York, en la reunión de Obama con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el presidente palestino, Mahmud Abás.
Zapatero, que estuvo acompañado en la rueda de prensa por el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, antiguo enviado especial de la UE para la región, aprovechó la ocasión para invitar a Israel a participar de manera oficial en las reuniones de la Alianza de Civilizaciones, iniciativa hispano-turca que busca el diálogo entre culturas y religiones.
El presidente del Gobierno español asistió hoy a la inauguración del 64 periodo de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, donde su esposa y sus hijas escucharon desde la tribuna de invitados el discurso de Obama.
Zapatero, que pronunciará mañana jueves su discurso ante la Asamblea General, considera que esta cita en la ONU es la más trascendente desde la del 2000, cuando se aprobaron los Objetivos de Desarrollo del Milenio, ya que el mundo afronta tres grandes retos: la crisis económica, la estabilidad y la seguridad y la lucha contra la pobreza.
Se trata, explicó, de un "momento histórico" tanto por los efectos de la recesión económica en el orden internacional, como por el hecho de que Obama esté al frente de la Administración estadounidense.
En su opinión, la salida de la crisis estará directamente vinculada a la respuesta que el mundo dé al cambio climático.
Zapatero pidió no afrontar el calentamiento global y el cambio de modelo energético como una misión que conlleva sacrificios, sino como una "inversión de futuro" para lograr una economía más sostenible.
Aunque Obama no haya prometido cifras concretas de reducción de emisiones, Zapatero aseguró que lo vio "claramente comprometido" en la lucha contra el cambio climático y subrayó el "enorme valor histórico y moral" de su discurso ante la Asamblea General de la ONU.
Este foro le ha otorgado su confianza y "yo la suscribo plenamente y un poco más allá", aseguró Zapatero.
No obstante, reconoció que en la cumbre sobre el cambio climático que se celebrará en diciembre en Copenhague para consensuar un acuerdo pos-Kioto habrá que compaginar la "comprensión" con la "exigencia" para que potencias como Estados Unidos se sumen a un acuerdo "suficiente".
"No se trata de esperar qué puede hacer por nosotros el presidente Obama, sino de ver cómo le podemos apoyar nosotros; si tiene éxito, el mundo tendrá éxito", manifestó.
Junto a esta cuestión, Zapatero aseguró que la Presidencia española de la UE se implicará firmemente en la defensa de los Objetivos del Milenio, que serán evaluados el próximo año, e instó a Europa, como máximo donante, a un "compromiso decisivo" con el desarrollo a pesar de la crisis.
Volvió a defender también su propuesta para que los países industrializados dediquen el 0,7 por ciento de su PIB a innovaciones tecnológicas e investigación en fuentes de energías alternativas o de reducción de emisiones contaminantes.
"No es un debate aislado de la grave recesión económica", reiteró Zapatero, convencido de que la salida "inteligente" de la recesión pasa por la política energética y medioambiental y de que su propuesta conseguirá respaldo internacional.
Tras pronunciar su discurso ante la Asamblea de la ONU, Zapatero viajará a Pittsburgh (EEUU) para participar en la cumbre del G-20.
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