Valladolid.- El hombre de 44 años juzgado desde hoy en Valladolid, acusado de matar de diecisiete cuchilladas a su ex pareja, ha asegurado que cometió la agresión cuando la víctima le espetó que el novio que ella tenía entonces valía más que él, más que el procesado.
"Vale más que tú" fue la frase que, según el encausado, desencadenó la muerte de su ex compañera sentimental, María V., de 42 años cuando ocurrieron los hechos de los que mañana se cumplirá justo un año.
El juicio ha comenzado hoy en la Audiencia Provincial de Valladolid, donde han sido elegidos los siete hombres y dos mujeres que forman el jurado popular que deliberará acerca de si el procesado, Ion B., cometió un asesinato al matar a su ex pareja, como sostienen las acusaciones, o un homicidio como alega la defensa.
El acusado ha explicado ante el jurado que convivió más de cuatro años con la víctima, ha precisado que ella abandonó la relación el 1 de marzo del año pasado porque "se fue con otro" hombre y ha mostrado en reiteradas ocasiones su arrepentimiento por haber quitado la vida a una mujer a la que amó "hasta la adoración".
El 22 de septiembre de 2008, víctima y procesado, ambos de nacionalidad rumana, se encontraban en la fábrica de componentes metálicos de Pedrajas de San Esteban (Valladolid) donde trabajaban ambos y fue sobre la 1,15 horas cuando el acusado acudió al servicio de la factoría, donde también se encontraba la víctima.
Ian B., quien ha asegurado que él desconocía que en ese momento se hallaba también en el baño su ex pareja, ha narrado cómo los dos se encontraron allí, junto al lavabo, y entablaron una conversación.
La víctima le preguntó si se había dejado en la casa que habían compartido ambos una bolsa de semillas de amapola que solía utilizar para elaborar pasteles caseros, ante lo que el procesado le contestó que la buscaría y, si la encontraba se la daría al día siguiente.
De esta forma, el encausado preguntó a su ex pareja "como en broma" si es que pensaba hacerle pasteles a "Salva", el novio con el que ella vivía en ese momento.
"Sí porque lo merece y vale más que tu", respondió la mujer, según ha explicado el encausado.
Fue en esos instantes de aquel "maldito lunes", cuando Ion B. cogió un cuchillo que se encontraba sobre el botiquín situado en los baños y "ocurrió lo que todos sabemos", ha dicho el encausado, quien asestó a la mujer diecisiete puñaladas tras lo que se dirigió al cuartel de la Guardia Civil.
"Yo la amaba mucho" ha subrayado el encausado, quien ha negado que antes del suceso amenazase o coaccionase a la mujer, ha admitido que sentía celos desde que el 4 de agosto del año pasado vio a su ex pareja con otro hombre y ha insistido en que nunca tuvo intención de matarla.
Provisionalmente, el fiscal y el abogado del Estado reclaman la imposición de una pena de dieciocho años de prisión por asesinato, con agravante de parentesco, al considerar que el acusado acudió al baño con un cuchillo de cocina para agredir a la víctima y sostener que ella no tuvo posibilidad ni de defenderse ni de huir, lo que supone que el procesado actuó con alevosía.
La acusación particular, que representa a la hija de la fallecida, demanda veinte años por asesinato y, alternativamente, quince por homicidio con agravantes de abuso de confianza y superioridad.
La defensa alega que el encausado cometió un homicidio, con las circunstancias atenuantes de arrebato y confesión, y pide diez años de cárcel.
La vista continuará mañana con la declaración de testigos.
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