Nuevos incidentes en la región uigur china de Xinjiang

Pekín.-  Nuevos incidentes se han producido en la región autónoma china de Xinjiang, habitada por la etnia uigur y escenario en julio de unas violentas protestas étnicas que dejaron centenares de muertos, informó hoy la agencia oficial Xinhua.

La prensa oficial reveló hoy que han sido detenidas más de quince personas que supuestamente atacaron con jeringuillas hipodérmicas a los transeúntes en Urumqi, unos ataques que las autoridades vinculan con las protestas étnicas del 5 de julio, las más violentas en décadas en China, con 197 muertos.

No se ha especificado la etnia de los atacantes, que podría ser uigur según testigos, mientras las autoridades locales afirman que entre las víctimas hay chinos, uigures, hui, kazajos y mongoles.

El departamento de sanidad de Xinjiang informó de que ninguna de las víctimas ha resultado infectada, aunque todavía están llevando a cabo exámenes médicos.

Estos ataques con jeringuillas "han causado una gran indignación entre todos los grupos étnicos de Xinjiang", señaló Zhu Hailun, responsable de asuntos políticos y legales del Partido Comunista en la región, en una alusión a las mencionadas protestas contra la inseguridad ciudadana.

"He visto en la televisión local que han detenido a 21 personas por atacar con jeringuillas a la gente", señaló a Efe en conversación telefónica una joven apellidada Han residente en Urumqi, capital de Xinjiang, quien también mencionó manifestaciones.

Han indicó que según ha oído las protestas se produjeron ayer, pero a diferencia de julio, cuando las calles estaban llenas de cadáveres, no tenía constancia de que esta vez hubiera muertos.

Por su parte, la oficina de información del Gobierno local de Xinjiang y la del Consejo de Estado, contactadas por Efe, dijeron desconocer si se habían producido protestas.

Según informan medios internacionales, estas nuevas protestas podrían haber reunido a cientos o miles de miembros de la etnia mayoritaria china, los han, en protesta por el deterioro de la seguridad que vive la región desde julio pasado.

Según datos oficiales, un total de 197 personas, en su mayoría chinos han, murieron a manos de uigures violentos en julio y otros 1.600 resultaron heridos, después de una manifestación en protesta por el linchamiento de uigures en el sur de China que devino violenta.

Sin embargo, los uigures en el exilio señalan que el número de muertos es superior y que la mayoría murió a manos del Ejército y en los linchamientos que llevaron a cabo los chinos el 7 de julio, atestiguados por la prensa desplazada a Urumqi.

La etnia uigur, de origen turco y credo musulmán, supone ya menos de la mitad de los 20 millones de habitantes que habitan Xinjiang, ya que en los últimos años Pekín ha favorecido el traslado de colonos chinos frente a los que los uigures dicen sentirse discriminados.

La portavoz de Asuntos Exteriores china, Jiang Yu, criticó hoy de forma indirecta al Parlamento Europeo (PE) por acoger a la líder uigur en el exilio Rebiya Kadeer, a quien Pekín acusa de provocar las propuestas, y rechazó el ofrecimiento de ésta de establecer un diálogo para aliviar el conflicto étnico.

"Los países extranjeros y organizaciones internacionales no tienen derecho a interferir en los asuntos internos de China", señaló Jiang en rueda de prensa.

En cuanto a Kadeer, la portavoz dijo que es "una delincuente condenada por las autoridades chinas y una separatista étnica" que "se inventó un montón de mentiras y rumores para atacar las políticas étnicas de China", por lo que su gobierno espera que ningún país "facilite sus actividades separatistas ni haga nada que dañe los intereses de China".

De lo contrario, la cooperación bilateral con esos países podría verse afectada, sentenció Jiang.