El verano acaba con un descenso de mortalidad del 22% en carreteras catalanas

Barcelona.-  La mortalidad en las carreteras catalanas ha bajado un 22% durante este verano, periodo vacacional que se dará por finalizado el próximo domingo por la tarde, cuando se prevé que regresen al área de Barcelona cerca de 250.000 vehículos.

El presidente de la Generalitat, José Montilla, que hoy ha visitado el centro de control del tráfico junto al conseller de Interior, Joan Saura, y el director del Servicio Catalán del Tráfico, Josep Pérez-Moya, ha destacado la cada vez mayor "concienciación" ciudadana para actuar con cautela al volante y ha pedido "paciencia y prudencia" de cara a la operación retorno.

Según los datos aportados por Pérez-Moya, durante este verano -entre el 21 de junio y el 24 de agosto-, han fallecido en las carreteras catalanas un total de 58 personas, un 22,6% menos que las 75 del pasado año.

Este dato es especialmente positivo si se tiene en cuenta además el trágico accidente del 30 de julio en Sant Pol de Mar (Barcelona), en el que un autocar con turistas holandeses y franceses se salió de la vía en una curva de la C-32, lo que provocó la muerte de 6 personas.

Precisamente, este accidente explica la diferencia entre la disminución de las víctimas mortales, que es del 22,6%, y la de los accidentes mortales, que se eleva hasta el 33%, ya que en verano de 2008 hubo 69 accidentes con fallecidos y en 2009 tan sólo 46.

El descenso de la mortalidad en las carreteras ha sido muy parejo en todo el territorio catalán, a excepción de las comarcas de Girona, donde este verano han fallecido 17 personas, las mismas que en el mismo periodo del año anterior.

En cambio, en Barcelona han fallecido este verano 20 personas (fueron 25 en 2008), en Lleida 8 (fueron 17 el pasado año) y en Tarragona han muerto 13 personas (frente a las 16 del pasado año).

En consonancia con Montilla, Pérez-Moya ha destacado positivamente que este verano se ha logrado "consolidar" la tendencia a la baja de la mortalidad en las carreteras catalanas, lo que ha atribuido, además de a las campañas de Tráfico, a que los conductores asumen cada vez más hábitos de conducción segura, como usar el cinturón, respetar los límites de velocidad y no mezclar alcohol y gasolina.

La reducción de la mortalidad también se ha registrado en los motoristas, ya que se ha pasado de 46 fallecidos el pasado verano a 36 este año (un 21,7% menos), si bien en los casos de ciclomotores se ha producido un pequeño incremento.

Por otra parte, Pérez-Moya ha admitido que los conductores han hecho un seguimiento "irregular" de la recomendación de Tráfico de circular por la derecha, y no por el centro o por el carril izquierdo, siempre que las condiciones de la circulación lo permitan.

Por este motivo, ha anunciado que en septiembre y octubre se mantendrá esta campaña, que no tiene carácter sancionador y que pretende concienciar a los conductores de que ir por la derecha garantiza una mayor seguridad de tráfico.

De cara a la operación retorno de verano, se prevé que se concentre el domingo (entre las 12.00 horas de la mañana y la medianoche), cuando se calcula que volverán al área de Barcelona cerca de 250.000 vehículos.

Pérez-Moya ha destacado que no se prevén grandes complicaciones, si bien los puntos más conflictivos pueden ser la AP-7, en La Jonquera, Sant Celoni, La Roca del Vallès y Sant Sadurní d'Anoia; la C-31, en el enlace de Castell-Platja d'Aro con la C-65; la C-32, entre Vilassar de Mar y Montgat y entre Sitges y Sant Boi de Llobregat-; y la N-340, en El Vendrell.

Como es habitual, los Mossos d'Esquadra desplegarán un amplio dispositivo, en este caso con 1.100 agentes, para efectuar cerca de 800 controles, especialmente de alcoholemia y drogas (264) y del uso del casco y cinturón (226), así como de velocidad (154).