Berlín.- El Bayern de Louis Van Gaal -metido en una crisis generada después de tres partidos sin ganar y tras caer derrotado ante el modesto Maguncia- recibe el sábado al campeón Wolfsburgo, equipo al que muchos seguidores bávaros deben tener presente en sus pesadillas.
El último enfrentamiento entre los dos equipos en la temporada pasada terminó con un varapalo para el Bayern -el Wolfsburgo ganó 5-1 y sentó las bases para obtener el título en la temporada pasada- del que en cierta manera no ha terminado de recuperarse.
Con aquella derrota -a la que siguió la debacle del Camp Npu donde el Bayern perdió con el Barcelona por 4-0- empezó el fin de la breve era de Jürgen Klinsmann. Ese partido también fue el comienzo de la consagración del brasileño Grafite y del bosnio Edin Dzeko como los mejores jugadores de la Bundesliga en la temporada pasada.
En esta ocasión, el Wolfsburgo acaba de perder -por 4-2 en casa ante el Hamburgo- y habrá que ver cómo ha logrado digerir ese revés -que le costó el liderato- durante la semana.
En todo caso, la situación del Bayern es mucho más difícil. Con sólo dos puntos logrados en tres jornadas y con críticas permanentes a las decisiones tomadas durante los últimos meses por las directivas, el club bávaro se enfrenta a la impaciencia de sus seguidores que ya han empezado a pensar que tal vez Van Gaal puede ser un nuevo experimento fallido, como lo fue la temporada pasada el experimento Jürgen Klinsmann.
A Van Gaal, por ejemplo, se le responsabiliza de la marcha de Lucio al darle preferencia al joven Holger Badstuber, un jugador del que muchos dicen que ha llegado a la titularidad sin más créditos que el de ser zurdo.
Van Gaal tiene que ganar el sábado -es la única fórmula para parar la tormenta- y para el Wolfsburgo se trata de un partido en el que puede definirse en buena parte si sigue siendo el del tramo final de la temporada pasada.
Pese a la derrota del sábado pasado, el Wolfsburgo está sólo un punto por debajo del nuevo líder, el Bayer Leverkusen de Jupp Heynckes, que recibirá el sábado al Bochum.
El Leverkusen viene de golear, 5-0 al Borussia Mönchengladbach, con lo que refrendó la vocación ofensiva que lo caracteriza.
En la lucha por el liderato -y empatados en puntos con el Leverkusen- también están el Schalke -que recibe el sábado al Friburgo- y el Hamburgo -que juega el sábado en casa contra el Colonia.
La jornada la completarán los siguientes partidos: Borussia Mönchengladbach-Maguncia 05, Stuttgart-Núremberg, Hannover 96-Hofffenheim, Eintracht-Borussia Dortmund y Hertha-Werder Bremen.
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