Toledo.- Algunos toledanos han evitado este año dar un beso en señal de respeto a la medalla de la Virgen del Sagrario o beber de los botijos en la catedral, tradiciones arraigadas en la ciudad cada 15 de agosto, y lo han hecho porque por esta vez también guardan respeto al contagio de la gripe A.
Si bien se han visto muchos besos lanzados a la medalla de la Virgen desde la distancia, o bien con toques con la mano para evitar un mayor contacto, otros muchos toledanos han hecho caso omiso de las recomendaciones y han seguido la tradición sin miramientos.
"Si me tiene que coger la gripe, me va a coger de todas formas", ha dicho a Efe un anciano después de beber de uno de los botijos con 'agua de la Virgen' instalado junto a la puerta del Reloj de la catedral.
Otros, sin embargo, han seguido el consejo del cabildo catedralicio, cuyo deán, Juan Sánchez, explicó que les pareció oportuna la recomendación, siguiendo las directrices de la Unión Europea.
El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, sí ha bebido del botijo, aunque en declaraciones a periodistas ha considerado que tomar medidas contra el contagio le parecía bien, ya que "no sabemos cómo se comporta todavía ese virus, pues habrá que tomar las precauciones normales".
"Son cosas que tiene que decir Sanidad", ha opinado el arzobispo acerca de la recomendación dada por el cabildo catedralicio.
Al arzobispo, llegado este verano de Valladolid a Toledo para sustituir al cardenal Antonio Cañizares, le ha gustado la procesión en el interior de la catedral, aunque le han sorprendido los aplausos al paso de la Virgen, que creía que eran propios "más del sur".
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha dicho que evitar el beso a la medalla es "prudente cuando se están haciendo esfuerzos por todas las administraciones públicas" por informar sobre la pandemia.
Por ello, es óptimo que las medidas "se extiendan a todos los ámbitos de la vida", ya que, según el alcalde, "no hay que confundir el respeto (a la Virgen del Sagrario) con la higiene razonable".
"El respeto es un acto de conciencia independientemente de cómo se exhiba", sea o no con un beso, ha apuntado García-Page.
Entre los miles de asistentes a la fiesta patronal, varios han restado importancia a la recomendación de no besar las medallas de 'la Morena', como se conoce en Toledo a la Virgen del Sagrario.
"Es una chorrada más" y "te puedes contagiar por cualquier cosa", es lo que ha dicho a Efe un hombre tras beber de un botijo.
Sin embargo, una mujer toledana ha manifestado que comprendía una precaución "que no tiene mayor importancia y si quieres a la virgen la tiras un beso y la quieres igual, beses o no la medalla".
Una madre madrileña que explicaba a su hijo las precauciones tomadas este año, ha señalado a Efe que le parecía "un poco exagerado" el consejo de no besar la medalla, pues "puede generar miedo y psicosis" y según sus familiares que son médicos la enfermedad de la gripe A "no tiene importancia".
Por el contrario, a una enfermera estadounidense le ha parecido "una buena idea", puesto que "uno puede hacer lo que quiera con su religión pero siempre y cuando no sea dañino para la salud".
Ha coincidido una turista venezolana en que "está bien emplear medidas de seguridad", pero sobre quién padecerá o no la gripe A, su opinión es que "delante de todos está papá Dios y él es el que sabe".
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