Barcelona.- La aprobación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de Nissan ha derivado en un cruce de acusaciones entre los sindicatos mayoritarios -CCOO, UGT y USOC- y CGT, que les responsabiliza de los 698 despidos, por haber firmado el plan industrial de las plantas catalanas.
CGT sostiene que la firma de este acuerdo, que preveía fijar en 2.800 personas la plantilla de las fábricas de Zona Franca y Montcada i Reixac (Barcelona), y admitía, por tanto, un sobrante de unos 1.400 operarios, es lo que ha llevado a la aplicación del ERE, que ha sido aprobado por la Generalitat.
La central anarcosindicalista ha acusado a CCOO, UGT y USOC de actuar de "mala fe" y de "permitir ciertas cosas que no deberían haber permitido", a la vez que ha denunciado que, porcentualmente, la mayor parte de los 698 afectados por el ERE son afiliados suyos.
Las acusaciones de la CGT han sido contestadas hoy por CCOO, que ha anunciado que está estudiando emprender acciones legales contra CGT por haber difundido "difamaciones" e "informaciones erróneas" sobre el ERE.
CCOO ha lamentado que CGT recurra al enfrentamiento entre trabajadores y sindicatos en vez de canalizar sus críticas hacia la decisión y forma de actuar de la dirección de Nissan, que es la verdadera responsable de los despidos.
El sindicato, además, ha avanzado que analizará jurídicamente la resolución del departamento de Trabajo y la relación de personas afectadas para evitar que se produzcan discriminaciones.
USOC ya ha anunciado que presentará un recurso de alzada contra la resolución de Trabajo, al considerar que las cifras que se autorizan están "desproporcionadas" en relación con la capacidad productiva de la fábrica y que impugnará la selección que se ha hecho de los afectados.
No obstante, el sindicato aún no puede formalizar esta impugnación, ya que Nissan no ha facilitado la lista completa de afectados.
La mayoría de trabajadores se ha enterado de su despido a través de una llamada telefónica, mientras que otros lo supieron ayer a través de burofax o en el mismo momento de acceder a la fábrica, cuando comprobaron que sus tarjetas magnéticas estaban desactivadas y no se les permitía el paso al recinto fabril.
"De momento tenemos un indicio bastante claro de que se ha producido una discriminación, pero hasta que no tengamos la lista no podremos denunciarlo oficialmente", ha señalado un portavoz de USOC.
Los sindicatos mayoritarios en Nissan, aún sorprendidos por la aprobación del ERE, no han convocado por el momento movilizaciones, aunque aseguran que deberán salir a la calle para denunciar un expediente que consideran del todo desproporcionado e injustificado.
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