Bengoa reitera que hubo irregularidades en las contrataciones, que Inclán niega

Vitoria.-  El consejero de Sanidad del Gobierno Vasco, Rafael Bengoa, ha ratificado hoy en el Parlamento Vasco la existencia de irregularidades en algunas contrataciones de servicios la pasada legislatura, mientras que su antecesor, Gabriel Inclán, las ha negado y ha respaldado a los presuntos implicados en el caso.

Ambos han comparecido hoy ante la Diputación Permanente del Parlamento Vasco, para hablar de las presuntas irregularidades en algunas contrataciones de Osakidetza, denunciadas por el actual Departamento de Sanidad a través de un expediente informativo.

La investigación ha analizado las adjudicaciones de servicios a varias empresas, con tarifas "aumentadas sin motivo", de las que son socios, y en dos casos apoderados, el ex jefe del hospital de Cruces, José Carlos Margüello, y los facultativos Eduardo Climent, y Francisco Javier Zubiaga.

Estas empresas, entre otros servicios, se ocupaban de la atención urgente a domicilio y de la derivación a la sanidad privada de los pacientes en listas de espera.

Bengoa ha hecho hincapié en la existencia de "numerosas irregularidades administrativas", cometidas "siempre a favor de las mismas personas y empresas", y ha abogado por que estos hechos, "con respeto a la presunción de inocencia, sean investigados más a fondo por las instancias competentes".

En este sentido, ha indicado que Sanidad esperará a conocer la auditoría que el Parlamento Vasco, previsiblemente, encargará al TVCP, para conocer si existen o no indicios de delito.

"Hay que esperar al informe del TVCP, al objeto proporcionar a la fiscalía un instrumento eficaz para sus actuaciones, en el supuesto de haya que acudir a la vía penal para decidir si hay indicios de prevaricación, o cohecho, o cualquier otro delito, así como su repercusión en la Hacienda publica, y si los autores actuaron por si mismos o influenciados por otros", ha explicado.

Por su parte, Inclán ha respaldado hoy a los tres médicos presuntamente responsables de irregularidades, ha destacado su "honradez y profesionalidad", y ha negado que permitiese ninguna irregularidad durante su mandato.

"Ni mi Gobierno, ni mi Departamento, ni nadie de mi equipo ha consentido jamás ni la más mínima irregularidad, ni grave ni leve", ha subrayado, Inclán, quien ha denunciado que se ha querido convertir este caso en un "culebrón" que ha causado "enormes perjuicios en el honor y reputación de personas honradas, con muy difícil reparación".

Inclán ha insistido en que las contrataciones citadas se hicieron de forma ajustada a la normativa, siguiendo todos los cauces legales, y ha indicado en que el aumento de las tarifas se realizó en un contexto en el que "se sucedieron una serie de optimizaciones del servicios médicos", como consecuencia, entre otras cosas, del compromiso de Osakidetza para reducir las listas de espera, o el aumento de los costes de las horas de guardia de los facultativos.

"Puede haber diferentes opiniones respecto a la elección de uno u contrato, pero han sido legales. No hubo quebranto económico, sino mejoras de salud", ha planteado. El ex consejero, además, se ha mostrado favorable a que el caso se lleve a los tribunales para que se aclaren todos sus extremos.

Ha dicho que desconocía que dos de los facultativos citados eran apoderados de las empresas implicadas en el caso, aunque ha indicado que, en todo caso, esa circunstancia no varía la legalidad de las contrataciones realizadas.

Además, tras reconocer que Margüello es su amigo, ha apuntado que "jamás ha mezclado la amistad con el trabajo", y ha agregado que "nunca he dado una instrucción para que a un amigo o conocido se le de nada o se le quite nada".