Hacienda Pinilla (Costa Rica).- Los presidentes de Mesoamérica expresaron hoy al término de la Cumbre de Tuxtla, en Costa Rica, su apoyo "total" al proceso de diálogo como única salida para solucionar la crisis política en Honduras.
"Los países firmantes reiteran su total apoyo al restablecimiento del orden institucional, por la vía del diálogo", señala la Declaración de Guanacaste, provincia costarricense donde tuvo lugar la cita presidencial.
El texto fue suscrito por los presidentes de México, Felipe Calderón; Guatemala, Álvaro Colom; El Salvador, Mauricio Funes; Costa Rica, Óscar Arias; Panamá, Ricardo Martinelli, y Colombia, Álvaro Uribe, así como altos funcionarios de Belice, la República Dominicana y Honduras.
Este último país fue representado en la Cumbre por el ex vicepresidente Aristides Mejía, delegado por el depuesto mandatario Manuel Zelaya, quien fue derrocado el pasado 28 de junio.
Si bien las conversaciones en la cita regional se centraron en la situación hondureña, la Declaración de Guanacaste, que incluye 73 puntos, repitió las posiciones que cada país y la comunidad internacional en general han manifestado acerca de este conflicto desde su inicio.
Los mandatarios acordaron "condenar enérgicamente" el golpe de Estado llevado a cabo en Honduras, así como "el grave daño perpetrado en contra de su institucionalidad democrática y el ejercicio legítimo del poder de su presidente constitucional, José Manuel Zelaya", apunta el texto en sus primeros puntos.
Además, los gobernantes expresaron su "apoyo" al Acuerdo de San José, la iniciativa presentada por el mandatario costarricense, Óscar Arias, en su condición de mediador y aseguraron que ésta "constituye una importante propuesta para encontrar una solución pacífica y negociada a este conflicto".
Aunque en un inicio se especuló sobre la posibilidad de que los presidentes emitieran una declaración especial sobre Honduras, al final decidieron incluir su opinión en el texto que reúne los acuerdos alcanzados en la Cumbre, que se celebró en un hotel de playa en la provincia de Guanacaste, en el Pacífico norte de Costa Rica, a 274 kilómetros de San José.
Otros de los temas abordados en la declaración fueron migración, seguridad, delincuencia y narcotráfico, sobre el cual los mandatarios decidieron "reiterar la solicitud al Gobierno de los Estados Unidos para incrementar los recursos de cooperación que destina a esta materia".
Además, los gobernantes dieron un fuerte impulso a los proyectos de integración vial, portuaria y eléctrica que forman parte del Proyecto Mesoamérica y acordaron promover "la integración económica" como "el camino para incrementar la competitividad de los países de la región".
La próxima Cumbre de Tuxtla se celebrará en Colombia en el 2010.
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