Río de Janeiro.- España espera contar con la ayuda de Brasil para promover un mayor acercamiento entre Europa y América Latina durante la presidencia española de la Unión Europea, en el primer semestre de 2010, afirma el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.
En un artículo que publica hoy el diario "Folha de Sao Paulo" con motivo del inicio hoy de su visita oficial a Brasil, el ministro español añade que espera conversar con las autoridades brasileñas sobre la colaboración bilateral para incentivar un mayor acercamiento entre ambos continentes.
"España asumirá la presidencia rotatoria de la Unión Europea el próximo 1 de enero de 2010 y, por vocación, dará prioridad a una mayor aproximación entre América Latina y el Caribe con Europa. Ese objetivo, al lado de nuestra cooperación mutua, será uno de los ejes de la próxima reunión bilateral España-Brasil", según el ministro.
Para eso, agrega, "contamos con la colaboración de este gran país. Un país fundamental en la relación birregional y con el cual compartimos el camino de la transformación y del futuro".
Moratinos escribe que España y Brasil se identifican totalmente en el objetivo de colaborar para que América Latina sea una región más democrática, más solidaria y más próspera.
"Este país es una pieza importante en el mosaico suramericano y hace años actúa como un catalizador democrático, un estabilizador político y comerciante e inversor en esta inmensa región. Además de esforzarse para contribuir con la consolidación de su institucionalización y la de toda Latinoamérica", subraya.
Moratinos recuerda que la apuesta definitiva de España en Brasil comenzó hace veinte años, "lo que nos transformó en el segundo mayor inversor y en un agente notable de transferencia tecnológica y de modernización".
Agrega que esa apuesta se consolidó en 2005 cuando los gobernantes de los dos países suscribieron una amplio convenio de asociación estratégica.
"Desde 2005 Brasil y España convergen en el terreno en que se aproximan Norte y Sur. Hemos construido una relación sólida y de futuro en la que defendemos conjuntamente principios y valores en la comunidad internacional e iberoamericana, y formamos un frente común para enfrentar los desafíos del siglo XXI", destaca el ministro español.
Según Moratinos, la actual coincidencia de las agendas de Norte y Sur quedó clara en la reciente Cumbre del G-8 en Aquila (Italia), en la que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, promovieron un programa de seguridad alimentaria por valor de 20.000 millones de dólares (14.000 millones de euros).
"La sintonía entre los dos presidentes, la confluencia de criterios y la complicidad política son reconocidas en la Alianza contra el Hambre, en la ayuda alimenticia a los países de América Central damnificados por los huracanes Ike y Gustav en 2008 o en la intervención conjunta en la resolución de tensiones políticas y económicas en la región", recuerda el ministro español.
Según Moratinos, Brasil y España trabajan juntos en la actual coyuntura internacional para superar la crisis económica mundial y promover un nuevo orden global con instituciones más sólidas para reglamentar los flujos financieros.
"Algunas de las medidas adoptadas en ese nuevo orden se inspiran en las reglamentaciones y en los procedimientos bancarios que están hace años en vigor en Brasil y en España", resalta Moratinos.
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