Palma.- La Policía Nacional se ha incautado de 860 gramos de cocaína, 350 gramos de heroína, 2,2 kilos de marihuana y dos botes de tranquimacín con ocasión de la operación policial realizada por cien agentes el pasado sábado por la tarde en el poblado palmesano de Son Banya, donde fueron detenidas 16 personas.
Mañana, martes, está previsto que 15 de los arrestados -diez mujeres y cinco hombres- pasen a disposición judicial, mientras que otra mujer detenida ha sido puesta en libertad por "razones humanitarias", para que pueda cuidar a sus hijos, según ha informado hoy la Policía en un comunicado.
Además, han sido requisados 30.900 euros en efectivo, 6 balanzas de precisión, 3 calculadoras, 1 prensa, 1 televisor y 1 cámara simulada.
También ha sido recuperado un mono "titi" valorado en 7.000 euros que portaba un chip, cuya desaparición fue denunciada en diciembre de 2007 por el parque marino de atracciones Marineland.
De este animal, que está protegido, se hizo cargo el servicio del Seprona de la Guardia Civil.
La operación "Marés" comenzó hace tres meses en Palma tras el fallecimiento de un individuo por sobredosis, lo que permitió la intervención policial de numerosas partidas de cocaína, marihuana y hachís preparadas para su venta, así como útiles para su tratamiento.
El golpe policial ha sido asestado a los nuevos clanes de narcotraficantes (Los sobrinos de La Paca, el clan de la Jesusa y el clan de los valencianos) que han tomado el relevo del principal, gestionado por Francisca Cortés "alias La Paca", que actualmente se encuentra en prisión junto con sus más cercanos colaboradores.
Esta operación ha sido dirigida por el grupo de Estupefacientes y el juzgado de instrucción número 5 de Palma y se desarrolló gracias al despliegue de un centenar de agentes armados y motorizados acompañados de perros policía y de un helicóptero.
En la misma, que comenzó a las 16.00 horas y concluyó a las 23.00 horas, participaron agentes de la Policía Judicial y Científica, Antidisturbios, efectivos de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) y numerosos integrantes de la Brigada de Seguridad Ciudadana.
Ante la presencia policial, algunos de los detenidos intentaron ocultar la droga.
De hecho, un bolso con 200 gramos de cocaína y una balanza de precisión fueron escondidos debajo de un vehículo, mientras que una bolsa roja fue arrojada al tejado de una de las viviendas registradas.
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