Barcelona.- Un centenar de empresarios chinos del área de Barcelona se ha concentrado hoy ante la sede de la conselleria de Interior para reivindicar el buen nombre de la comunidad china en Cataluña y defender la legalidad de su actividad, tras la redada en talleres ilegales de Mataró (Barcelona).
En la redada, que los Mossos d'Esquadra llevaron a cabo la semana pasada por orden judicial en un total de 72 talleres de Mataró, se detuvo a 77 empresarios chinos -que ya han quedado en libertad con cargos- y se liberó de la explotación a 450 trabajadores, también chinos.
Una semana después de la actuación policial, un centenar de empresarios chinos se ha concentrado ante la sede de Interior, donde una representación, con el apoyo de la patronal catalana de pequeñas y medianas empresas (Pimec), ha sido recibida por el jefe de gabinete del conseller Joan Saura, Xavier Rius.
En la reunión, los empresarios le han entregado al jefe de gabinete de Saura sendas cartas dirigidas al conseller y al jefe de los Mossos d'Esquadra, reclamando una reunión para analizar en profundidad su situación y abogando por recuperar la "buena imagen legal" de la comunidad china.
Al término de la reunión, el presidente de la Federación de Empresarios Chinos en Barcelona, Lin Chuan Ping, ha asegurado que su interés no era buscar el enfrentamiento sino reivindicar el "buen nombre" de los empresarios chinos, ya que estima que el "99,9%" de ellos respeta siempre la legalidad.
Chuan Ping ha hecho además un llamamiento a los empresarios catalanes para que "sigan confiando" en los empresarios chinos y les sigan encargando pedidos, ya que, sino, cree que se corre el riesgo de que muchos comercios tengan que cerrar y que centenares de trabajadores se queden en el paro.
Este empresario ha destacado que la comunidad china en Cataluña está integrada por 33.000 personas censadas, de las que 28.000 cotizan en la Seguridad Social y un tercio del total son autónomos, según datos facilitados por Chuan Ping.
Al ser preguntado por las condiciones infrahumanas en las que trabajaban algunos de los empleados de los talleres clausurados por los Mossos, Chuan Ping ha insistido en que él sólo defiende los talleres legales, que estima que son mayoría, y ha recordado que los empleados cobraban en Mataró entre 20 y 30 euros al día y que en cambio en China ganan como máximo 50 euros al mes.
"Trabajando en estos talleres están mejor y más tranquilos que en China y además no están ni robando, ni pidiendo en el metro o en la calle, sino trabajando", ha remarcado.
En la misma línea, el representante de Pimec Alejandro Goñi, que también ha acudido a la reunión con la conselleria de Interior, ha destacado que casi la totalidad de los empresarios chinos trabajan dentro de la legalidad.
Según Goñi, estos empresarios se han sentido ahora "humillados" por la actuación de los Mossos d'Esquadra, que cree que han dejado a mucha gente en el paro y en la calle y a muchos talleres precintados, sin poder atender pedidos y con el material encerrado en los talleres.
Cuando se le ha preguntado por las condiciones de los trabajadores, Goñi ha rehuido la respuesta y se ha escudado en que su organización se limita a defender la legalidad de los talleres y que "otra cosa son las condiciones de los trabajadores", que no ha querido valorar porque cree que no es tarea de Pimec.
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