La liberación de rehén anunciada por las FARC hace dos meses está en un punto muerto

Bogotá.-  La liberación del militar Pablo Emilio Moncayo, uno de los dos rehenes más antiguos de las FARC y anunciada hace exactamente hoy dos meses, está en un punto muerto debido a las condiciones impuestas tanto por la guerrilla como por el Gobierno colombiano.

El éxito del proceso "depende" tanto del Gobierno que preside Álvaro Uribe como de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), reconoció hoy a Efe un portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

El CICR "sigue ofreciendo las garantías" para que se produzca la liberación del cabo Moncayo, secuestrado hace más de once años, y "espera" que se produzca un acuerdo "en un corto tiempo".

Las FARC anunciaron el pasado 16 de abril que entregarían de manera unilateral a Moncayo, al igual que hicieron a principios de este año con otros seis secuestrados.

La condición impuesta por los guerrilleros es que únicamente entregarán el rehén a su padre, el profesor Gustavo Moncayo, y a la senadora opositora Piedad Córdoba, quien ya participó en las negociaciones para las anteriores liberaciones.

Pero el presidente colombiano se opone a que Córdoba intervenga y solo autorizó la participación en el operativo al CICR y a la Iglesia católica.

A principios de este mes, el máximo comandante de las FARC, Guillermo León Sáenz, alias "Alfonso Cano", comentó que "la intransigencia de Uribe" ha impedido la entrega de Moncayo.

Tal y como recuerda hoy la prensa colombiana, otras liberaciones también anunciadas y ocurridas en el último año y medio han sido más rápidas.

La entrega de la ex candidata a la vicepresidencia Clara Rojas y de la ex parlamentaria Consuelo González de Perdomo demoró 24 días, ya que las FARC la anunciaron el 18 de diciembre de 2007 y tuvo lugar el 11 de enero de 2008.

Un día más (25) tardó la liberación de los ex congresistas Gloria Polanco, Luis Eladio Pérez, Orlando Beltrán y Jorge Eduardo Gechem, anunciada el 2 de febrero de 2008 y concretada el 27 de ese mismo mes.

La entrega de cuatro uniformados (tres policías y un militar) y de los dos últimos políticos que tenía en su poder la guerrilla se completó el 5 de febrero pasado, 46 días después de haber sido anunciada.

Pablo Emilio Moncayo fue secuestrado el 21 de diciembre de 1997 cuando tenía 18 años y cumplía el servicio militar como cabo primero en una base de comunicaciones del Ejército en el cerro de Pastascoy, en el sureño departamento de Nariño.

Cuando fue capturado, Moncayo soñaba con concluir un curso de inglés en el que se había matriculado para viajar después a Estados Unidos, ir a la universidad y convertirse en ingeniero electrónico.

Su padre, el profesor Moncayo, conocido como "Caminante por la Paz" por las largas marchas a pie que ha realizado para pedir la liberación de su hijo, hizo un "llamado de auxilio" al Gobierno para que facilite la liberación de su hijo "sano y salvo".

En una reciente entrevista con Efe, también pidió al Gobierno de Uribe que propicie una reunión urgente con la senadora Córdoba para acordar la logística de la entrega.

La senadora opositora sigue siendo clave en el proceso de liberación de Moncayo, ya que sin su participación las FARC no entregarán al rehén, uno de los 22 secuestrados "canjeables" que la guerrilla pretende intercambiar por medio millar de rebeldes presos.

Fuentes cercanas a Córdoba dijeron hoy a Efe que las FARC "han sido claras" al manifestar que la senadora debe estar presente en la entrega del rehén.

Según el portavoz, la senadora busca una reunión con el Alto Comisionado colombiano para la Paz, Frank Pearl, para reactivar el proceso de liberación de Moncayo.