Pamplona.- Los partidos navarros han coincidido hoy en atribuir a estrategias electorales la diferente gestión que desde UPN hacen el ex-presidente Miguel Sanz y la actual presidenta Yolanda Barcina de su relación con el PP y con PSN, discrepancias que han instado a que no influyan en la gobernabilidad de Navarra.
En declaraciones a los periodistas antes de participar en la sesión de la Junta de Portavoces del Parlamento foral, Carlos García Adanero (UPN), ha asegurado que en su partido están "todos en el mismo barco" y que, "cada uno desde sus responsabilidades" tienen el "mismo objetivo", el de "hacer lo mejor" para Navarra en el caso de Sanz y para Pamplona en el de Barcina.
Sobre las supuestas discrepancias entre ambos, García Adanero, secretario general de UPN, ha recordado que las decisiones sobre pactos, ya sea la de la ruptura del que mantenían con el PP como la de la firma del que supone el apoyo a los presupuestos de Navarra con el PSN, han sido tomadas por los órganos del partido, con la presencia en ellos tanto de Sanz como de Barcina.
Ha indicado que todo ello "pone de manifiesto que UPN es un gran partido, el mayor y mejor que hay en Navarra, que tiene un espectro social amplísimo y que tiene dos líderes que a cualquier otro le gustaría tener" y que se trata de "un partido vivo".
En el caso del pacto con PSN, García Adanero ha aludido a las críticas socialistas sobre las "maniobras" de Barcina para colmar sus "ambiciones políticas", y ha asegurado el dirigente regionalista que "UPN está cumpliendo con sus compromisos respecto a los pactos que tiene firmados y así lo va a seguir haciendo hasta final de legislatura", ha dicho en relación con los que mantiene con PSN, de los que Barcina "también fue partidaria".
El resto de los partidos también ha analizado la situación, de forma que desde Nafarroa Bai Patxi Zabaleta, aunque ha advertido del "respeto" que tienen a las evoluciones de otros partidos, sí que ha señalado que "lo que puedan ser contradicciones entre sensibilidades diferentes, las de las dos almas de UPN, son episodios".
Así, a su entender el verdadero "desafío" del partido regionalista es el de la "modernidad y la democratización de sus referencias ideológicas", ya que ha recordado que UPN nació de una escisión de UCD para defender "la idea del derecho a decidir de los navarros como expresión de los derechos históricos o Fueros", cuando su evolución "ha sido justamente en el sentido contrario" y "se ha convertido en un partido ultraconstitucionalista".
Por PSN, Samuel Caro ha sido crítico con Yolanda Barcina al entender que con sus evoluciones "está utilizando la calculadora de votos para ver qué es lo que más le conviene" y "en su mente sólo aparecen las cifras de posibles votos que pueda ganar en función de con quien esté, de si va sola o en compañía del PP", alianza esta última con la que "es mucho más difícil" que cuenta con el apoyo socialista, ha advertido.
Por ello, ha subrayado la "total falta de responsabilidad" que supone el que la presidenta de UPN "juegue con los votos de los ciudadanos" dos años antes de las elecciones y en medio de una crisis económica "donde lo que debe primar en los partidos políticos es la responsabilidad".
Desde esta convicción, ha pedido a Barcina "que sea leal" con los pactos para mantener la gobernabilidad y estabilidad de Navarra, algo en lo que ha dicho tener la "sensación" de que "Miguel Sanz quiere" pero de que "Yolanda Barcina estaría encantada con que las cosas saltasen por los aires ".
El presidente de CDN, José Andrés Burguete, también ha aludido a las "diferencias" que parece haber entre Sanz y Barcina, ante las que ha apelado a ambos a que "no olviden sus importantes responsabilidades en la gestión" del Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona.
Al respecto, ha advertido que "no es oportuno ni conveniente" comenzar ahora con "una dinámica preelectoral y partidista", ya que "estamos obligados a dedicarnos a trabajar por resolver los problemas de la ciudadanía" en una situación de crisis, de forma que a CDN "no nos causan problema los supuestos guiños de Barcina al PP", con quien "puede estar dispuesta a restañar las heridas para conseguir volver a ser la lista más votada".
Asimismo, por IUN Ana Figueras ha advertido de que UPN y PP "ideológicamente son los mismos", pero hoy el partido regionalista "ha adoptado una serie de actitudes que son consecuencia de la conveniencia u oportunidad en la política", lo que le ha llevado a gobernar "con un apoyo del PSN", que "probablemente" ha arrastrado a UPN a "actitudes más moderadas y a formas más cautelosas".
En todo caso, ha insistido en ver "el alma del PP muy similar a la de UPN" y por ello, "dentro del grupo de UPN tiene que haber fricciones", ha dicho tras atribuir los últimos movimientos de UPN a "una perspectiva electoral de aquí a dos años" en las que UPN y PP deberán luchar por un espacio similar en "competencia".
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