Secciones bajar

Barceló y Glissant dialogan sobre la obra del artista mallorquín en la ONU

EFE
Actualizado 12-06-2009 21:19 CET

Ginebra.-  El escritor francés Edouard Glissant y el pintor Miquel Barceló participaron hoy en un diálogo sobre la creación artística organizado por la Oficina de la ONU en Ginebra en la impresionante sala coronada por la gigantesca cúpula creada por el artista mallorquín.

La conversación, a la que asistió numeroso público, giró en gran parte en torno a la dificultad de los artistas para dominar la materia y las posibilidades extremas de utilizarla como medio de expresión.

La sala número XX del Palacio de las Naciones, sede europea de la ONU, fue donada por España el pasado noviembre tras ser totalmente renovada y convertida en una obra de arte por Barceló.

Llamada desde entonces sala de la Alianza de Civilizaciones, este espacio sirve de lugar de reuniones del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

Glissant, nacido en Martinica y uno de los intelectuales más influyentes del Caribe, dijo sentirse "estupefacto" ante la obra del pintor español, que describió como "una cúpula donde vemos que el mundo se escucha y se encuentra, y no que se rechaza".

Consideró que Barceló "superó una frontera" en su lucha contra la materia y, tras alabar su trabajo, deploró que muchos pintores se hayan sentido "vencidos ante la imposibilidad de trabajar la materia".

"Siempre lamenté que los artistas se hayan volcado en la facilidad de la instalación, el vídeo y la fotografía", declaró el también poeta martiniqueño.

Opinó que las instalaciones, cuando son utilizadas como soporte para obras artísticas, representan "el retroceso del artista ante la dureza de la materia que tiene ante sí".

Barceló, por su parte, confesó que su obra de la sala XX fue "completamente experimental" y que la abordó sin haber resuelto antes el problema técnico que suponía trabajar en la enormidad de este espacio.

Este trabajo, agregó, le permitió "aprender sobre las relaciones entre la pintura y el cuerpo, y del cuerpo con el mundo".

"Descubrí que mi mano era como la mano de una mosca en este enorme espacio y tuve que crear herramientas para manejarlo y poder repetir gestos que había hecho con la mano en mi taller", explicó.

Glissant comentó durante el diálogo que "la paradoja de la cúpula es que el arte es inexplicable, supone la desmesura tanto como la mesura, el desorden como el orden".

Señaló que la cúpula creada por Barceló "es el signo de que podemos hacer una locura en un lugar tan solemne y que la locura más extrema que existe es la que incumbe a la materia".

El artista español mencionó que tardó años en aceptar el reto de decorar la sala de la ONU y cuando lo aceptó decidió que "no quería hacer una obra digital, sino un gran desborde de materia que permitiese sentir la materia viva pictórica".

Di lo que quieras

Aceptar

Si quieres firmar tus comentarios puedes iniciar sesión »

En este espacio aparecerán los comentarios a los que hagas referencia. Por ejemplo, si escribes "comentario nº 3" en la caja de la izquierda, podrás ver el contenido de ese comentario aquí. Así te aseguras de que tu referencia es la correcta. No se permite código HTML en los comentarios.

Di lo que quieras

Lo sentimos, no puedes comentar esta noticia si no eres un usuario registrado y has iniciado sesión.
Si ya lo estás registrado puedes iniciar sesión ahora.

Volver a actualidad Volver a portada
subir Subir al principio de la página