Santander.- El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha anunciado hoy que en su próxima entrevista con el ministro de Fomento, José Blanco, va a "poner el grito en el cielo" por el retraso que se acumula en la construcción de los tramos de la Autovía de la Meseta (A-67) de la provincia de Palencia.
"Voy a poner el grito en el cielo, porque no entiendo qué complicaciones puede haber", ha señalado Revilla, tras su visita a la fábrica de galletas de Gullón en Aguilar de Campoo (Palencia).
El presidente regional asegura que se "hace cruces" comprobar que las obras se retrasan en las llanuras de Tierra de Campos, cuando ya se han terminado en los tramos de Cantabria con mayores complicaciones orográficas, como el comprendido entre Reinosa y Pesquera, que incluye uno de los viaductos más altos de Europa.
"Hemos sido capaces de terminar la parte más dura, la más difícil. Hemos sido capaces de hacer el tramo Reinosa y Molledo, que es la obra más complicada de Europa. Y resulta que, en estas llanuras de Osorno, siguen con la carretilla y la pala", ha dicho.
Revilla ha añadido que tampoco acepta como explicación el hecho de que algunas de las constructoras contratadas por el Ministerio de Fomento para esos tramos pueda tener problemas económicos.
A su juicio, eso se resuelve "contratando a otra", porque "no pueden pagar el pato los miles y miles de personas" que están pendientes de que se termine la construcción de la autovía que comunicará a Cantabria con Madrid a través de la Meseta.
El presidente cántabro también ha adelantado que pedirá a Fomento que cumpla su compromiso de adjudicar este año el tramo del tren de alta velocidad comprendido entre Palencia y Alar del Rey y el de hacer lo propio en 2010 con su continuación hasta Reinosa.
En cuanto a la mejora de la carretera autonómica que comunica Potes con Cervera de Pisuerga (Palencia) a través del puerto de Piedrasluengas, Revilla se ha lamentado de que uno de los tramos esté paralizado por denuncias de colectivos ecologistas.
El presidente de Cantabria se ha preguntado si, en el siglo XXI, es excesivo que una carretera tenga seis metros y medio de anchura.
También se ha cuestionado si debe imperar "el talibanismo" de quienes que pretenden que "en este país volvamos al burro y a la alpargata" o la mejora de las comunicaciones de una comarca, Liébana, donde la otra salida natural atraviesa el desfiladero de la Hermida y el Parque Nacional de los Picos de Europa.
En cambio, ha rehusado pronunciarse sobre las directrices de ordenación del territorio que pretendía aprobar la Junta de Castilla y León para posibilitar la construcción de la estación de esquí de San Glorio, en el norte de Palencia y León.
Al ser preguntado sobre este asunto, Revilla ha recordado las medidas que tuvo que adoptar el Gobierno de Cantabria "para poner fin a la barbarie de la construcción en la costa" (el Plan de Ordenación del Litoral) y ha abogado por compaginar el desarrollo con la conservación de "espacios naturales emblemáticos".
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