La Paz.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, presentó hoy en el departamento de Santa Cruz (este) un nuevo bono de ayuda para mujeres embarazadas y madres con hijos de hasta dos años cuya finalidad es combatir la mortalidad maternoinfantil.
Morales, ante un auditorio lleno de mujeres acompañadas de bebés, comenzó a pagar simbólicamente esta renta destinada a gastos médicos para incentivar que las embarazadas y las madres acudan a los controles prescritos para gestantes y menores.
"El bono es para disminuir los niveles de mortalidad maternoinfantil. No es posible que sigamos perdiendo niños y madres", dijo el presidente, quien puso el ejemplo de su propia familia, en la que, de siete hermanos, solo tres viven en la actualidad.
"Cómo es posible que más del cincuenta por ciento de los hijos de una familia pierdan la vida. (Buscamos) con esta renta evitar, bajar o disminuir la mortalidad maternoinfantil", insistió.
El gobernante señaló que el bono fue creado "pensando en la gente que más necesita del Gobierno" como "un beneficio social, que no es parte de prebenda" ni tiene "carácter electoral".
Reveló que la idea en principio era crear una ayuda solo para las madres solteras debido al alto número de mujeres que son abandonadas por sus parejas cuando quedan embarazadas, aunque después se decidió extender a madres con hijos pequeños la cobertura de esta renta.
Destacó la necesidad de apostar por las políticas de salud recordando que el líder cubano Fidel Castro le insistió en este área y en la educación en una entrevista que ambos mantuvieron hace años cuando Morales era aún dirigente cocalero.
"Yo quería escuchar cómo se hace la revolución, cómo se ha organizado, cómo ha llegado a ser comandante y no me habló de nada de eso. Solo me habló de salud y educación", precisó.
El llamado bono "Juana Azurduy", en homenaje a una heroína de los alzamientos contra la colonia española de hace doscientos años, se pagará después de cada control médico a las mujeres embarazadas y las madres de niños de hasta dos años.
La asistencia consistirá en un pago de 50 bolivianos (equivalente a 7 dólares) por cada uno de los primeros cuatro controles prenatales y una ayuda de 120 bolivianos (17 dólares) para el parto.
Las mujeres que lleven a sus niños a las consultas médicas recibirán cada dos meses 125 bolivianos (17,6 dólares), hasta que los menores cumplan los dos años, momento en el que se considera que disminuye el riesgo de desnutrición crónica.
En total, la mujer que se somete a todos los controles médicos, acabará recibiendo poco más de 1.800 bolivianos, casi 260 dólares.
Este bono se suma a otras ayudas directas puestas en marcha por Morales en Bolivia para sectores especialmente desfavorecidos como ancianos y escolares.
En concreto, el Gobierno de Morales viene pagando una ayuda mensual para los mayores de 65 años por un importe equivalente a 28 dólares (la llamada "Renta Dignidad") y una cantidad similar, pero de carácter anual, para estimular la asistencia de los niños a la escuela ("Bono Juancito Pinto").
Se trata de programas gubernamentales orientados a la reducción de la pobreza en Bolivia, que afecta al menos al 60 por ciento de la población del país.
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