Madrid.- Los grupos parlamentarios reprocharon hoy al Gobierno que el real decreto que contiene medidas extraordinarias para el mantenimiento y fomento del empleo y la protección de los desempleados haya llegado al Congreso sin el aval de los agentes sociales.
Todos los portavoces de los grupos parlamentarios, a excepción del socialista, criticaron hoy al ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, durante la validación del citado real decreto, que fue aprobado por 184 votos a favor (PSOE, CiU, BNG y CC) y 162 en contra.
No obstante, en una segunda votación, el Parlamento aprobó por unanimidad que el texto se tramite como proyecto de Ley, lo que permitirá introducir cambios a través de enmiendas presentadas por los diferentes grupos.
El portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, justificó el voto en contra de su partido porque las medidas son "insuficientes, incoherentes y vuelven a frustrar las expectativas de los trabajadores".
Montoro también criticó al ministro de Trabajo por no conseguir un acuerdo dentro del proceso de diálogo social y acusó al Gobierno de actuar con improvisación, por lo que pidió una política que devuelva la confianza a la sociedad.
El diputado de CiU Carles Campuzano validó el decreto aunque también reprochó a Corbacho que hubiese llegado al Congreso sin un acuerdo con la patronal y los sindicatos, al tiempo que reclamó reformas "de mayor calado".
Desde el PNV, Emilio Olabarría acusó al Gobierno de ofrecer a los grupos parlamentarios la posibilidad de tramitar el decreto como proyecto de ley cuando, en un principio, las medidas eran de carácter urgente, contradicción que se ha producido "para evitar su derrota".
El diputado de ERC, Joan Tardá, manifestó que su grupo no iba a votar a favor del documento porque además de no contar con el respaldo de los agentes sociales, le ha molestado que el Gobierno "no cumpla su palabra" con respecto al papel "determinante" que, según el Ejecutivo, tendría Cataluña en la gestión del aeropuerto de El Prat.
Tanto ERC, como PNV, Nafarroa Bai e IU, criticaron especialmente la medida referente a la bonificación de las cuotas de la Seguridad Social para las empresas que contraten a desempleados.
En este sentido, la diputada de Nafarroa Bai Uxue Barkos también votó en contra porque la citada bonificación conllevará a mayores discrepancias y discriminaciones entre los trabajadores, mientras Rosa Díez de UPyD aseguró que el Gobierno se había comprometido a no aprobar ninguna medida sin respaldo de la patronal y los sindicatos.
Gaspar LLamazares, de IU, reclamó que se mantenga el diálogo social y la negociación con los partidos de izquierda y calificó algunas de las medidas de "discriminatorias".
La diputada del BNG Olaia Fernández también destacó la importancia del Diálogo Social, y demandó al Gobierno ampliarlo con más agentes sociales para que no haya exclusiones.
Por su parte, el portavoz socialista, Jesús Membrado, defendió el decreto por el carácter "urgente" de las medidas ante la actual situación económica.
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