Madrid.- El Congreso de los Diputados ha acogido hoy algunos de los últimos avances tecnológicos de la industria automovilística que se irán incorporando en el futuro a los vehículos de serie y que, según los fabricantes, permitirán reducir significativamente la cifras de siniestralidad en carretera.
En el marco de la I Jornada Parlamentaria sobre Seguridad Vial organizada por el Congreso, la Cámara Baja ha expuesto algunos de estos sistemas que ha podido probar en persona el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
Uno de ellos es el "alcolock", un dispositivo que impide arrancar el motor del coche si el conductor ha superado la tasa de alcoholemia permitida.
Rubalcaba ha mostrado su deseo de que "ojalá" en el futuro este dispositivo se pueda incorporar de forma generalizada a todos los vehículos.
En la actualidad se plantea su uso únicamente para el transporte público o para los conductores reincidentes.
El ministro también ha comprobado el funcionamiento del HMI adaptativo diseñado por SEAT, que monitoriza el estado del conductor y del entorno, percibe riesgos potenciales y toma decisiones.
De este modo, por ejemplo, si el conductor recibe una llamada de teléfono en el momento en el que aborda una rotonda, el sistema aplaza esa llamada hasta que la haya superado.
También, si detecta que el conductor tiene sueño -por medio de la frecuencia de parpadeo- o está distraído, el sistema es capaz de lanzar una alerta e incluso, en algunos modelos, puede activar un vibrador en el asiento para sacarlo de ese estado.
Citroën también ha presentado todos los sistemas de seguridad activa y pasiva instalados en su berlina C6, como la alerta de cambio involuntario de carril, o el dispositivo que permite ver en el parabrisas del vehículo diversa información importante para el conductor sin que tenga que desviar la mirada de la carretera.
Para el director del Seguridad Vial del RACE, Tomás Santa Cecilia, los nuevos dispositivos tecnológicos que pueden incorporar los vehículos no hay que verlos "como un gasto" que encarece el precio sino como "una inversión en la vida".
Las dependencias del Congreso también han acogido dos simuladores de conducción segura de coches y motos, diseñados por el RACE y Honda.
Los simuladores, que imitan todas las características del vehículo, permiten situar al conductor en situaciones de riesgo, tanto en carretera como en ciudad, con lluvia, hielo o con los neumáticos en mal estado.
Un vehículo que se incorpora a la vía de improviso o un pequeño atasco que bloquea una autopista son incidencias a las que se enfrentan a diario millones de conductores en todo el mundo, pero que en ocasiones no terminan bien.
Estos simuladores se utilizan ya en autoescuelas y en academias de policía local y también se exhiben en zonas de ocio para que los jóvenes sean conscientes de sus limitaciones y del peligro de ponerse al volante después de beber alcohol.
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