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La crisis centra el acto de inauguración del VIII Congreso regional de CCOO

EFE
Actualizado 12-03-2009 16:36 CET

Mérida.-  La crisis económica y la falta de recetas tradicionales para hacerle frente, así como las incertidumbres en torno a su duración, han centrado hoy el acto de inauguración del VIII Congreso de CCOO de Extremadura, que concluirá mañana con la reelección de Julián Carretero, único candidato, como secretario general.

El Palacio de Congresos y Exposiciones de Mérida acoge este congreso, en el que 180 delegados debatirán también sobre el modelo económico de la región y que ha comenzado con un atípico acto de inauguración que ha incluido un recital de Pablo Guerrero, un concierto de un cuarteto de cuerda y un homenaje al poeta Ángel Campos, fallecido hace unos meses.

A la inauguración han asistido, entre otros, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo; el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara; su antecesor en el cargo, Juan Carlos Rodríguez Ibarra; la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira; o los líderes del PP e IU en la Comunidad Autónoma, Juan Carlos Monago y Pedro Escobar, respectivamente.

Asimismo, se han dado cita en el Congreso otros líderes sindicales, como el secretario de la Confederación General de Trabajadores portugueses, Diego Julio Serra; o el responsable de UGT-Extremadura, Miguel Bernal.

De igual forma han asistido representantes del empresariado o de las entidades bancarias, como el secretario de la Confederación Empresarial Extremeña (CREEX), Juan Manuel Arribas; y los presidentes de Caja Extremadura y Caja Rural de Extremadura, Jesús Medina y Mariano Señorón, respectivamente.

En su discurso, Ignacio Fernández Toxo ha considerado necesario que el Gobierno "recupere la iniciativa" y ha dicho que mientras el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero "aguante las presiones, nos va a tener de su lado".

Además, ha indicado que el Gobierno "necesita un impulso, no sé si un cambio de personas", aunque ha criticado que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, parece haber "tirado la toalla".

Ha destacado que en una circunstancia como la actual acometer medidas como el abaratamiento o la flexibilización del despido supondrían un "desastre" y ha aclarado que CC.OO defenderá de "forma intransigente" los derechos de los trabajadores, pero no va a ser "la infantería de nadie ni de nada".

Fernández Toxo ha manifestado que "es mentira" que la crisis económica en España tenga sus raíces en el mercado de trabajo o en la flexibilidad del marco de relaciones laborales, por lo que "si no está ahí el problema, tampoco lo pueden estar las soluciones".

Ha insistido en que las causas de la crisis están en la caída de la actividad económica y en la falta de liquidez en las empresas, así como en la caída del consumo, por lo que ha considerado que la pretensión de la CEOE de hacer crecer los salarios por debajo del IPC "sólo puede abundar en una mayor destrucción del tejido económico y del empleo".

Por su parte, Guillermo Fernández Vara ha indicado que en estos momentos "sobran los discursos y falta el discurso", además de mostrarse convencido de que no se podrá salir de la crisis "si no somos capaces de hacer todo lo que esté en nuestras manos dentro y fuera del país".

Por ello, ha considerado esencial una "acción concertada", además de precisar que, de lo contrario, "vamos a perder todos" y agradecer a CCOO su apoyo al Gobierno cuando "lo más fácil -ha dicho- sería tirar por el camino del medio y ponerse enfrente".

Vara ha indicado que las administraciones no pueden dejar "huérfanos" a los desempleados y ha destacado que para salir de la crisis no valen recetas como la bajada de impuestos o el abaratamiento del despido, medidas que, a su juicio, pueden poner en peligro la cohesión y la igualdad.

También ha reiterado que "son tiempos de sinceridad", de quienes puedan poner iniciativas y soluciones "encima de la mesa", además de reivindicar "el valor del trabajo" no sólo como forma de sustento sino como fuerza "dignificadora y liberadora", por lo que el aumento del paro, ha dicho, debilita la sociedad democrática.

El alcalde de Mérida, Ángel Calle, ha reivindicado el papel de los sindicatos en el progreso de Extremadura y ha apostado, en estos momentos, por "salirse de los caminos trillados y apostar por fórmulas productivas diferentes".

El secretario general de UGT-Extremadura, Miguel Bernal, ha enmarcado el congreso de CC.OO como el primero que se celebra en Extremadura desde que "se declaró oficialmente la crisis" y ha apostado por ser "valientes a la hora de plantear recetas claramente de la izquierda y que ataquen aquellas teorías que nos han llevado a la situación de hoy".

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