La Habana.- La corporación Habanos S.A., productora de las afamadas marcas Montecristo, Cohíba o Partagás, tuvo ventas en 2008 por unos 390 millones de dólares, un 3 por ciento menos que el año anterior, según datos divulgados hoy por la compañía.
El vicepresidente comercial de Habanos, Manuel García, indicó en una conferencia de prensa que "a pesar de haber sido un año muy difícil para el negocio y en sentido general para los productos de lujo en el mundo (...) los ingresos del grupo en el año 2008 alcanzaron aproximadamente una cifra de 390 millones de dólares".
Esa cifra, con la que Habanos mide no sólo las ventas de tabacos "prémium", elaborados a mano, sino todos los productos que comercializa, "representa aproximadamente una bajada del 3 por ciento en comparación con el 2007", agregó.
"La rentabilidad del grupo se ha mantenido al nivel más o menos del año pasado", dijo el vicepresidente de Habanos, empresa propiedad al 50 por ciento del Estado cubano y de la hispano-francesa Altadis, perteneciente al grupo británico Imperial Tobacco.
Entre las razones para la caída, García apuntó la entrada en vigor de leyes de prohibición de fumar en lugares públicos en mercados importantes como Francia, Alemania o los Emiratos Árabes, y los efectos de la crisis internacional a partir del segundo semestre de 2008.
La crisis ha llevado, según el ejecutivo, a "una reducción de 'stocks' en prácticamente todos los canales del mercado".
Además, hubo una reducción de más del 11 por ciento en el número de pasajeros que realizan viajes internacionales, lo que implica una caída de las ventas en las tiendas libres de impuestos (duty free), canal de comercialización para el 24 por ciento de la producción de la compañía en 2008, explicó García.
"Pensamos que este año va a ser muy complicado, dado que en 2008 vimos la crisis financiera y durante este año veremos la crisis de consumo", agregó el ejecutivo, aunque señaló que Habanos espera mantenerse "más o menos" en los valores de ventas del año pasado.
Sobre el impacto en la provincia de Pinar del Río, cuna del tabaco más afamado de la isla, de los huracanes que azotaron Cuba el año pasado, García señaló que "por suerte no ha habido afectación a la cosecha" y "se sigue disponiendo de materia prima suficiente para abordar la demanda de los habanos".
"No prevemos ningún tipo de afectación por este motivo en la oferta que podemos darle al consumidor de habanos en el mundo", agregó.
Preguntado por la posibilidad de que el nuevo Gobierno de Estados Unidos flexibilice el embargo comercial que Washington aplica a Cuba, de modo que Habanos pudiera vender en ese país, García indicó que los ejecutivos de la empresa tienen "problemas mucho más graves que enfrentar en el mundo".
Sin embargo, reconoció que entrar en el mercado estadounidense "significaría una gran potencialidad" para el habano.
Recordó que "aunque ese mercado sufrió una contracción de dos dígitos en 2008, sigue siendo el más importante del mundo para los tabacos prémium".
El también vicepresidente Javier Terrés afirmó que el mercado estadounidense preocupa a la compañía "lateralmente", pero que Habanos tiene ahora una cuota de mercado mundial, sin Estados Unidos, del 70 por ciento, y podría tener un porcentaje similar en el mercado estadounidense.
De acuerdo con datos de la compañía, en Estados Unidos se venden anualmente entre 230 y 250 millones de los cerca de 400 millones de tabacos comercializados en el mundo.
Habanos tiene aproximadamente el 25 por ciento del mercado mundial de cigarros puros elaborados a mano.
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