Mientras la cúpula del PP se esforzaba hoy por dar a los fotógrafos una imagen de unidad, en los visores de las cámaras la instantánea más buscada era otra.
No era precisamente una imagen de concordia a lo que iban a la caza los cámaras que acudían a la sede de la calle Génova. Lo que parecían rastrear, entre las caras serias como pocas veces de los populares, era al contrario cualquier gesto que delatara tensiones entre los dirigentes, en especial los de Madrid.
Por el visor de los fotógrafos se movía de forma especial el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, o la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, las dos piezas más buscadas desde que se diese a conocer la presunta trama de espías de Madrid. Pero sin olvidar tampoco a los máximos dirigentes de la calle Génova, y su líder Mariano Rajoy, o a la concejala madrileña Ana Botella.
A juzgar por las caras congeladas por las cámaras, no sería tanta la unidad buscada por los populares. Sin embargo, las instantáneas a veces también pueden engañar. ¿Qué piensas tú?
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