Zaragoza.- Chunta Aragonesista (CHA) ha acusado hoy al Gobierno de Aragón de "amparar" una línea de "muy alta tensión" que con su trazado reedita dos anteriores, la Aragón-Cazaril y la Graus-Sallente, desechadas por sus afecciones medioambientales y para la salud de las personas.
Así lo ha asegurado hoy en rueda de prensa el diputado de CHA en las Cortes de Aragón Bizén Fuster, quien ha asegurado que el Gobierno de Aragón, al dar el visto bueno a esta línea (Peñalba-Monzón-Isona) "contraviene" su posición histórica y los acuerdos unánimes de la Cámara de rechazo a las líneas de alta tensión ya descartadas.
Fuster ha explicado que contra el proyecto de la línea Aragón-Cazaril se luchó de forma denodada entre 1985 y 1999, año en el que finalmente se descartó por la oposición en Francia y España y por sentencia firme del Tribunal Supremo, y que la que pretendía suplir las carencias de ésta, la Graus-Sallente, también se descartó por su contestación social y resoluciones administrativas.
Pero ahora, ha agregado, se plantea la Peñalba-Monzón-Isona como si fuera nueva cuando su trazado es una "fusión" de las dos anteriores.
"En realidad es una reedición", ha insistido el diputado, quien ha asegurado que el consejero de Industria, Arturo Aliaga, en una respuesta escrita al propio Fuster, reconoce que en el mapa editado por Red Eléctrica Española del "Sistema eléctrico ibérico 2008" ya no figura el proyecto Aragón-Cazaril pero porque ya se prevé la nueva línea a 400 kilovoltios.
Fuster ha precisado que las líneas de muy alta tensión, a partir de 300 kilovoltios, son aquellas con máxima afección para la salud que exigen, según la normativa europea, una distancia mínima de 500 metros de los núcleos habitados, aunque en España el criterio es de ocho metros, con el que en todo caso se reconoce que hay afecciones.
En este nuevo proyecto, sobre el que no hay previsión para su puesta en marcha y está en fase de gestación inicial, las afecciones son "evidentes" al pasar incluso por encima de un núcleo habitado, Luzás, en Huesca, y muy cerca de otros, con lo que no se cumpliría ni la normativa más "laxa" española.
Además, ha advertido Fuster, en esa respuesta Aliaga informaba de que en septiembre pasado se firmó un protocolo con Red Eléctrica de España y CHA ya ha solicitado una copia para comprobar si el Gobierno de Aragón está amparando un proyecto que "contraviene" los pronunciamientos del Ejecutivo y supondría un "desacato" a los acuerdos unánimes de las Cortes.
CHA espera conocer en los próximos días el contenido de ese protocolo y también, a través de una interpelación al consejero de Industria que se tramitará en el próximo pleno de la Cámara, la posición oficial del Gobierno de Aragón sobre este nuevo proyecto, contra el que ya se ha creado una plataforma.
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